En horas de la madrugada de este lunes, agencias de noticias iraníes confirmaron la muerte del presidente Ebrahim Raisi (63), junto al ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian y otras siete personas, luego de estrellarse el helicóptero en el que se trasladaban en la provincia montañosa de Azerbaiyán Oriental, al noroeste de la nación.
Previamente, la organización iraní Media Luna Roja había reportado que se encontró la ubicación de la zona donde había caído la aeronave, tras doce horas de estar inubicable. Pese a ello, se desconocía el área específica, como también el estado de salud de Raisi y de los otros tripulantes.
Minutos después, agencias como Reuters y Associated Press citaron a medios locales de la nación asiática, informando que tras la utilización de drones “no se ven señales de vida” en el sitio del suceso, desvaneciendo las esperanzas de que los tripulantes se encontraran en buen estado de salud.
“El helicóptero del presidente Raisi quedó completamente quemado en el accidente... desafortunadamente, se teme que todos los pasajeros hayan muerto”, dijo un funcionario iraní a Reuters después de que los equipos de búsqueda localizaran los restos.
En tanto, el jefe de la Media Luna Roja iraní, Pirhossein Kolivand, dijo a la televisión estatal que “podemos ver los escombros y la situación no parece buena”.
Labores de búsqueda
Los equipos de rescate lucharon contra tormentas de nieve y terrenos difíciles durante la noche para llegar a los escombros en la provincia de Azerbaiyán Oriental en las primeras horas del lunes.
Apenas amaneció este lunes en la nación asiática, los rescatistas pudieron visualizar el helicóptero desde una distancia aproximada de dos kilómetros, por medio de drones.
Horas antes, el paradero del mandatario era desconocido, y las autoridades estaban realizando la búsqueda con estos vehículos no tripulados, además de perros entrenados y equipos especializados en rescate para intentar localizar la aeronave. Cabe indicar que la niebla y el mal tiempo dificultaron los trabajos, según indicó el ministro del Interior, Ahmad Vahidi.
Raisi había llegado a la presidencia de Irán en 2021, tras vencer en comicios calificados como poco competitivos. Anteriormente fue presidente del Tribunal Supremo, y -según reporta la cadena CNN- ha supervisado un período de represión intensificada de la disidencia en una nación convulsionada por protestas lideradas por jóvenes contra el gobierno clerical.
Cabe indicar que el fatal accidente ocurre en un momento en que Medio Oriente está sumido en la agitación, con Irán respaldando a milicias armadas en toda la región que están atacando activos de Israel y Estados Unidos.
La semana pasada, altos funcionarios estadounidenses e iraníes mantuvieron conversaciones en Omán sobre las tensiones regionales y el programa nuclear de Irán, según personas familiarizadas con las reuniones. El suceso se produjo después de que Irán atacara directamente a Israel por primera vez, lanzando unos 300 misiles y drones contra el país. La mayoría fueron interceptados por una coalición estadounidense e israelí en la región.
