Muhammad Najem tiene 15 años, vive en Guta Oriental y utiliza su celular para tomar fotografías y grabar videos de lo que ocurre en esa región siria, donde en las últimas semanas han muerto más de 600 civiles. Desde el sábado 18 de febrero los ataques del régimen de Basher Assad para anular al último bastión opositor rebelde en la zona, se intensificaron y han generado una de las peores masacres desde que el conflicto sirio comenzó hace siete años.

Guta Oriental, una zona rural que alguna vez albergó hermosos huertos, ha vivido sitiada y bajo sucesivos combates desde 2013. Desde ese año todo cambió, las destrucciones de edificios, hospitales, panaderías, y la muerte de civiles comenzaron a ser parte del diario vivir de sus habitantes. Muhammad Najem, a pesar de su corta edad, alzó la voz y a través de las redes sociales muestra las consecuencias de la masacre. "Grabo los videos para que el mundo pueda ver cómo hemos vivido estos siete años. La gente debe saber la verdad que todo el mundo oculta sobre lo que sucede en Siria", cuenta a La Tercera PM el joven sirio.

Najem vive con su familia, pero cuenta que su padre murió hace dos años cuando una bomba impactó la mezquita en la que estaba rezando. Hoy, este joven pasa la mayor parte de su día escondido en una mezquita, ya que desplazarse por las calles puede convertirse en una peligrosa aventura. "Yo estaba en la calle con mis amigos, escuchamos el sonido de aviones de guerra y corrimos rápidamente a un subterráneo, la gente va siempre a los subterráneos", relata. Sin embargo, un día, Salim, uno de sus amigos, no acudió al subterráneo con ellos y regresó a su casa, la cual minutos después fue impactada por un proyectil. Najem cuenta que Salim sobrevivió de milagro.

Hace cerca de cinco meses que Muhammad dejó de ir al colegio, ya que éste fue destruido. Uno de los videos subidos a las redes sociales muestra precisamente los escombros de su escuela. "Es mi escuela la que se ha convertido en un objetivo para los crímenes de Putin y Assad. Es la mezquita de mi ciudad la que se ha convertido en un objetivo para los aviones de Putin y Assad. Este es el Centro de la Media Luna Roja Árabe Siria en mi ciudad que se ha convertido en un objetivo para el terrorismo de Putin y Assad", dice en un video.

También dejó de jugar fútbol. "Antes de la guerra me gustaba mucho el fútbol. Desde que me uní a un club, entrenaba todos los días", cuenta el joven. Su protagónico papel en este conflicto ha dado la vuelta al mundo. Diversos medios lo han citado y han mostrado la valentía de Muhammad Najem al recriminar la masacre a la que debe enfrentarse cada día. "Espero que la guerra termine y la paz prevalezca", sentencia en su diálogo con La Tercera PM.