Este domingo, la directiva de la Unión Demócrata Independiente (UDI) viajará hasta Buenos Aires, con el objetivo de tener coordinaciones con las autoridades del gobierno de Javier Milei para concretar la extradición de Galvarino Apablaza, el exlíder del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) acusado de ser el autor intelectual del asesinato al fundador de la colectividad, Jaime Guzmán.

Apablaza, de 73 años, ingresó a las Juventudes Comunistas en 1968 y fue detenido después del golpe de Estado de 1973, pasando por varios centros de detención antes de ser expulsado del país en 1974 hacia Panamá. Desde allí, por razones de salud, decidió trasladarse a Cuba. En 1986, tras regresar clandestinamente a Chile, se integró al Trabajo Político del FPMR, pero después de conocida la internación de armas de Carrizal Bajo y fracasado el atentado contra Augusto Pinochet, debió regresar rápidamente a Cuba. De vuelta al país en 1988, tras la muerte de Raúl Pellegrin en octubre de ese año, asumió plenamente la jefatura del FPMR-Autónomo, la facción más radical del frentismo.

Galvarino Apablaza, el exlíder del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Jaime Guzmán. Foto. Archivo

Bajo el alias de “Comandante Salvador”, participó en la planificación del asesinato del entonces senador Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards, hijo del propietario del diario El Mercurio, en 1991. Después de estos eventos, huyó primero a Cuba y luego, en 1994, se trasladó a Argentina.

Apablaza fue detenido en las afueras de Buenos Aires en noviembre de 2004 por orden de Chile. Un mes después, la Corte Suprema chilena aprobó su solicitud de extradición. Sin embargo, un pedido de asilo político por parte de Apablaza detuvo su extradición, quien afirma ser inocente de los cargos que se le imputan y asegura que es perseguido judicialmente por su lucha en contra del régimen de Pinochet.

En julio de 2005, un juez federal argentino rechazó el pedido de extradición chileno, por considerar que en el país no estaban dadas las condiciones políticas para garantizar un juicio justo. El caso llegó hasta la Corte Suprema de Argentina, que en 2007 suspendió su decisión hasta que la Casa Rosada definiera el pedido de refugio político solicitado por el acusado.

En 2010 la entonces presidenta Cristina Kirchner le otorgó la condición de refugiado político. Dicho status fue revocado en 2017 por Mauricio Macri, pero Apablaza apeló, por lo que no pudo ser extraditado y su caso aún está en juicio.

En noviembre pasado, la bancada de la UDI en el Congreso envió una carta al recién electo presidente argentino Javier Milei -antes de asumir el mando-, para pedirle que resolviera la extradición de Apablaza desde el país vecino. Y en abril, el partido destacó los dichos de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que durante el Encuentro Nacional de la Empresa (Enade) 2024, expresó que “lo que nosotros hemos hecho como gobierno es activar con la justicia este caso, porque Argentina no va a ser tierra que mantenga a asesinos”.

La ministra también agregó que “esperamos poder cumplir con Chile en ese sentido (…) porque desde nuestro punto de vista, el refugio político estuvo mal dado y fue una respuesta ideológica del gobierno de Cristina Fernández”. El domingo pasado, en entrevista con El Mercurio, el presidente Javier Milei se refirió a las gestiones para la extradición de Apablaza, asegurando que “somos un gobierno que decimos el que las hace, las paga”.

De acuerdo con el abogado de la UDI, Pablo Toloza, quien fue consultado esta semana por La Tercera, el objetivo del viaje será “coordinar y ver en qué podemos ayudar desde acá respecto de la causa que se está llevando por parte del estudio jurídico que contrató el gobierno de Chile, desde la época del Presidente Lagos”.

Rodolfo Yanzón, abogado de Galvarino Apablaza que consiguió su calidad de refugiado. Foto: Gobierno de Argentina

En entrevista con La Tercera, el abogado argentino de Galvarino Apablaza, Rodolfo Yanzón, especializado en Derechos Humanos, dio a conocer sus valoraciones sobre el viaje de la directiva de la UDI y las recientes declaraciones de las autoridades argentinas sobre el caso que aún está en juicio.

La directiva de la UDI se trasladará este domingo a Buenos Aires para hacer gestiones por el caso de Apablaza. ¿Qué evaluación tiene usted de este viaje?

En primer lugar me parece que es una buena decisión que viajen a Buenos Aires. Es una bella ciudad: pueden comer un buen asado, ir al teatro, ir a las grandes librerías… Parece que ahí van a encontrar un punto más que interesante para dar entidad al viaje. Porque en cuanto a Apablaza, les voy a decir lo que vengo diciendo hace 14 años: Apablaza tiene reconocido un estatus de refugiado de acuerdo con la Convención Internacional de Naciones Unidas. Por lo tanto, pueden hacer 40 viajes, 400, pero no van a cambiar las cosas. Es más, lo único que están haciendo es seguir dándome a mí la prueba contundente de que la protección de la Convención tiene que seguir urgente. ¿Por qué? Porque claramente sigue existiendo una persecución política. Hay que aclarar una cosa, porque baten mucho el parche (“tocar el tambor”) con que el refugio de Apablaza fue un capricho de una presidenta o de un gobierno, y esto es absolutamente falso.

De acuerdo con la Convención Internacional de Refugiados, Apablaza es refugiado desde hace 50 años. ¿Por qué? Porque viene padeciendo la persecución del pinochetismo, tanto en dictadura como en gobiernos constitucionales hasta el día de hoy. Sobre el viaje del domingo, yo aplaudo que vengan, porque además me viene bien a mí porque tengo una prueba más para demostrar justamente que la persecución existe. Hay un principio básico que los señores de la UDI desconocen, porque los derechos humanos les da urticaria, es que la Convención Internacional de Refugiados tiene el principio básico de la absoluta ajenidad, la prohibición de injerencia de parte del país que genera las condiciones por las cuales el estatus de refugiado se reconoce. En este caso es Chile y lo único que hace es una vez más reconocer que hay causales por las cuales sostener el refugio.

La ministra del Interior, Carolina Toha, junto a la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, en la Enade 2024. Foto: Andrés Pérez/La Tercera

¿Entonces considera que acá no hay materia judicial en juego, sino que lo que usted califica de persecución política?

Sí, para nosotros es claro que hay una persecución política. Y es una persecución política de la UDI. Ni siquiera del gobierno de Chile, ni de otra colectividad política. Es exclusiva de la UDI, entonces, bueno, el viaje les va a venir bárbaro, pero no va a cambiar la situación. Y por otro lado, porque vi que dicen que iban a tomar contacto con el estudio de abogados que el gobierno de Ricardo Lagos contrató y siguen contratando.

Hay algo que tiene que conocer el pueblo chileno, y es que están pagando hace 20 años a un estudio jurídico 10.000 dólares por mes para no hacer nada. Yo no quiero quitarle el negocio a un colega argentino que bien hace de ganar sus buenos dólares, me parece bárbaro, excelente, pero a los chilenos les tengo que decir, miren, que están gastando más de dos millones de dólares al día de hoy en pagar por un trabajo que no se hace. ¿Por qué no se hace? Porque hace 14 años que al señor Apablaza se le reconoció el estatus de refugiado y no tiene nada que hacer un bufé de abogados en la Argentina representando al Estado chileno o a quien sea. Entonces, fíjense también eso, si quieren seguir tirando el dinero como lo están haciendo al día de hoy.

¿Y cómo está la condición de refugiado de Apablaza? ¿O sea, usted piensa que el intento que va a hacer la UDI este fin de semana puede sacarlo de esa condición de refugiado o acelerar el proceso judicial en curso?

No va a hacer nada. A ver, van a venir a comer asado, a ir al teatro, está buenísimo. No van a hacer otra cosa. Esto es para sacar noticias en los diarios, y demostrar interés. Pero no es más que eso. La UDI no puede hacer absolutamente nada. Ni la UDI, ni el señor presidente de Chile, ni el presidente de la Argentina. ¿Por qué? Porque acá se está aplicando la Convención Internacional de Refugiados. Y en todo caso lo tendrá que resolver el sistema judicial argentino. Y si eso sucediera, van a ocurrir tantos otros años y vamos a seguir hablando de lo mismo como si fuéramos ardillitas dando vueltas en la misma ruedita. Pero la situación no va a cambiar.

Y otro elemento también que hay que agregar al caso, que yo leo en las noticias de los diarios de Chile, que pareciera ser que la protección a Apablaza se la dio un gobierno caprichosamente. Bueno, hay que decir una vez más. Miren, señores, por la misma causa a (Miguel Ángel) Peña Moreno se le reconoció el estatus de refugiado en Bélgica. Por la misma causa se le reconoció el estatus de refugiado en Francia al señor (Ricardo) Palma Salamanca, que además sí está condenado, cosa que Apablaza no.

El presidente de Argentina, Javier Milei, el 26 de enero de 2024. Foto: Europa Press

Hay un tema que el pueblo chileno tendría que resolver y es que déjense de hablar de que esto fue la obra de un gobierno castrochavista. Fíjense que algo no está funcionando en Chile para que todas estas decisiones se hayan tomado en distintos lugares del mundo. También en la Argentina. Y además hay que aclarar otra cosa: en la Argentina hay muchos chilenos en los últimas años, décadas, que han sido reconocidos como refugiados justamente por la misma persecución que existe en Chile contra militantes de izquierda.

Entonces, a ver, el caso de Apablaza es uno de tantos. Y no es solo la Argentina. Son tantos países de distintos continentes que dijeron cuestiones similares. Entonces, me parece que también hay que dejar en claro que la UDI, que tiene un sello pretendidamente democrático cuando no lo es, está buscando otra cosa. Está buscando, por un lado, mancillar los derechos humanos, concretamente la Convención de Refugiados, y continuar con la persecución política. Esto es todo. Pero que vengan, que la van a pasar muy bien. Buenos Aires es una ciudad bellísima.

¿Qué opina usted de los dichos de Bullrich sobre que Argentina “no va a ser tierra de asesinos” y los de Milei, que sobre Apablaza señaló que “el que las hace las paga”?

Eso es… A ver, son dos personajes que hablan muy ignorantes, por empezar. Y el señor Milei es un desquiciado, que está donde está, vamos a ver cuánto dura, para hacerle los deberes sucios a un par de grupos económicos. Pero más allá de eso, no tiene ninguna entidad. Solamente Patricia Bullrich fue allá a tratar de dar vuelta a lo que dijo respecto de Chile en cuanto a la posible existencia de células terroristas y demás. Nada, es puro cacareo de gente que no tiene la más mínima idea de lo que habla y tiene cero sentido de la responsabilidad, tanto Milei como Bullrich. La verdad que no hay que tenerlos en cuenta. Lamentablemente están donde están y hacen mucho daño, pero este es un tema argentino, qué le vamos a hacer.

¿Cómo ve que pueda evolucionar el caso? O sea, ¿piensa que va a quedar estancado permanentemente? ¿O cree que puede haber algún resultado favorable para Apablaza?

El señor Apablaza es un refugiado político y seguirá siendo un refugiado político.