Las autoridades rusas iniciaron el viernes una investigación penal contra Yevgeny Prigozhin, el propietario del contratista militar Grupo Wagner, por sus supuestas amenazas de destituir al ministro de Defensa ruso.
El anuncio se produce tras una declaración de Prigozhin en la que acusaba al ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, de ordenar un ataque con cohetes contra los campamentos de Wagner en Ucrania, donde sus soldados combaten en nombre de Rusia contra las fuerzas ucranianas.
Prigozhin afirmó que sus tropas se movilizarían ahora para castigar a Shoigu e instó al Ejército a no ofrecer resistencia. Prigozhin declaró que “esto no es una rebelión armada, sino una marcha de la justicia”.
El Ministerio de Defensa ruso rechazó la afirmación de Prigozhin, y el Comité Nacional Antiterrorismo dijo que había abierto una investigación penal por cargos de hacer llamados a un golpe militar.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el Presidente ruso, Vladimir Putin, había sido informado de la situación, y añadió que “se estaban tomando todas las medidas necesarias”.