Cuando la guerra de Rusia en Ucrania ya cumple su segunda semana, no solo el Presidente Vladimir Putin se encuentra en problemas, sino que también varios de sus cercanos y por distintos motivos.
Los que mantenían vínculos estrechos con Putin, especialmente por sus valores antiliberales y el culto del “hombre fuerte”, han tenido conflictos para distanciarse de él.
A continuación, algunas de estas figuras.
Matteo Salvini
La visita a Polonia del líder ultraderechista italiano Matteo Salvini fue un verdadero fiasco, tras ser increpado el martes por el alcalde de una localidad fronteriza con Ucrania por su apoyo en el pasado a Putin. “Queremos mostrar nuestra profunda consideración por todas las organizaciones italianas, todas las empresas de Italia que nos apoyan”, explicó el alcalde de la ciudad de Przemyśl junto al líder de la Liga.
“Pero al mismo tiempo (...) tengo un regalo para usted”, añadió Wojciech Bakun mientras enseñaba a las cámaras una polera con la cara de Vladimir Putin y en la que había escrito en ruso: “Ejército de Putin”. Un modelo como con el que Salvini se fotografió en 2014 en la Plaza Roja de Moscú.
“Nos gustaría ir con usted a la frontera y a un centro de acogida de refugiados para que vea personalmente lo que ha hecho Putin, su amigo, a todas esas personas que están cruzando la frontera, unas 50.000 al día”, dijo el alcalde, que estaba irritado.
Desde el inicio de la invasión rusa en Ucrania, Salvini fue objeto de críticas por su abierta admiración por Vladimir Putin. “Hombres como él, que se preocupan por los intereses de sus propios ciudadanos, se necesitan por decenas” en Italia, declaró en una ocasión.
La camiseta con el retrato de Putin se la puso inclusive durante una audiencia en el Parlamento Europeo.
Gerhard Schröder
Los estrechos vínculos del excanciller alemán Gerhard Schröder (1998-2005) con Putin se encuentran en el centro de un conflicto por una demanda presentada ante la fiscalía alemana por crímenes de guerra relacionada con la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
Schröder, de 77 años, preside el consejo de administración del gasoducto germano-ruso Nord Stream y el consejo de vigilancia del consorcio energético ruso Rosneft, además de estar nominado para ingresar en la junta directiva del gigante ruso Gazprom, a partir de junio.
Desde el Partido Social Demócrata se le ha instado a renunciar a sus cargos y distanciarse de Putin
El gasoducto Nord Stream se inicia con el acuerdo entre Schröder y Putin en abril de 2005, unos meses antes de la derrota electoral del entonces canciller alemán, que luego pasó a ocupar los mencionados cargos.
El primero de los gasoductos, Nord Stream 1, entró en funcionamiento en 2011, mientras que la licencia para que empiece a funcionar Nord Stream 2 quedó bloqueada al día siguiente del inicio de la invasión por decisión del gobierno de Olaf Scholz.
François Fillon
El exprimer ministro francés (2007-2012) es otro amigo de Putin. Desde 2021 forma parte del consejo de administración de la petroquímica Sibur, propiedad de los oligarcas rusos Leonid Mikhelson y Gennady Timchenko, incluidos en la lista de sancionados por Reino Unido.
En un afán por distanciarse de Putin tras estallar la guerra en Ucrania, Fillon anunció su rápida dimisión de Sibur y ha señalado que el líder ruso “es el único culpable de haber desencadenado un conflicto que podría haberse evitado, que debería haberse evitado”.
Marine Le Pen y Zemmour
En Francia, el equipo de la ultraderechista Marine Le Pen ha tenido que destruir folletos impresos para la campaña presidencial, porque contenían una foto de la candidata de Agrupación Nacional junto al mandatario ruso. Habían impreso 1,2 millones de copias, de cinco páginas cada una. No han dicho cuántas habían distribuido, solo que el motivo es una falta de ortografía, según consignó el diario La Vanguardia.
En 2014, Le Pen no condenó la anexión de Crimea y recibía préstamos de bancos rusos cercanos a Putin. Pero tras la guerra en Ucrania ha cambiado su “opinión” sobre él, indicó La Vanguardia.
Mientras que el candidato nacionalista francés a la presidencia inspirado en Donald Trump y presentador de TV, Éric Zemmour, ha señalado que “admiraba” a Putin como un verdadero “patriota” y entendía sus preocupaciones por el deseo ucraniano de entrar en la OTAN. Ahora también cree que la invasión es “injustificable”. Al contrario de Le Pen, es el único candidato que no está dispuesto a acoger a refugiados ucranianos.
Alex Salmond
Otro político beneficiado por la generosidad del Kremlin es Alex Salmond, exprimer ministro escocés y exlíder el Partido Nacionalista Escocés (SNP), indicó al diario español La Razón. Salmond no tuvo problemas en admirar “ciertos aspectos” de la política de Putin tras la anexión de Crimea y defendió que su patriotismo era “totalmente razonable”. En 2017, el político escocés fue criticado por aceptar lanzar un nuevo programa semanal en la cadena RT, máquina de propaganda del Kremlin, llamado ‘The Alex Salmond Show’.
Tras la invasión rusa a Ucrania el 24 de febrero, el líder independentista anunció que, aunque no había recibido “una sola interferencia editorial” en su programa, no podía continuar con la transmisión “hasta que se restablezca la paz”.