Este lunes comenzó el 43vo Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas en Ginebra, instancia donde el Secretario General del organismo, António Guterres, hizo un llamado a "tomar acción" y terminar con las violaciones a los DD.HH. que se viven todo el mundo.

En su discurso inicial Guterres expresó su preocupación por la persecución contras las minorías y los "niveles alarmantes de femicidios" que se han registrado este año. En ese sentido aseguro que "los derechos humanos están siendo atacados" y agregó que, ningún país está a salvo" frente a esta deriva".

"Los miedos avanzan" y "los derechos humanos enfrentan desafíos crecientes" en todas partes, agregó, e instó a la comunidad internacional a actuar para invertir la tendencia.

El secretario general de la ONU no citó a ningún país en particular en su discurso, aunque hizo alusiones al conflicto en Siria o la situación de los migrantes que quieren instalarse en Europa.

Así, subrayó el caso "de los civiles atrapados en enclaves en regiones arrasadas por la guerra, con hambre y bombardeados pese al derecho internacional", y denunció los "tráficos de seres humanos, que afectan a todas las regiones del mundo".

Guterres también mostró su preocupación por el "retroceso en los derechos de las mujeres, los niveles alarmantes de femicidios, los ataques contra los defensores de los derechos de las mujeres y la persistencia de las leyes y las políticas que perpetúan la sumisión y la exclusión".

"La violencia contra las mujeres y las niñas es la violación de los derechos humanos más extendida", destacó.

Por otro lado, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, hizo un llamado a tomar acción urgente para no dejar "a nuestros jóvenes y sus hijos un gigantesco incendio incontrolable de crisis de los derechos humanos que se mezclan y agravan".

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