Los senadores italianos eligieron este jueves como presidente de la Cámara Alta a Ignazio La Russa, uno de los fundadores de Hermanos de Italia y que exhibió en una entrevista hace cuatro años una habitación en la que guardaba reliquias de la dictadura, incluida una figura de Benito Mussolini.
La Russa salió elegido con 116 votos, en una primera victoria política para el partido de Giorgia Meloni que, sin embargo, se ha visto empañada por el desplante de Forza Italia, que mostró simbólicamente su aparente malestar por la gestión de las negociaciones para repartir cargo.
Meloni celebró la elección de “un patriota, un servidor del Estado, un enamorado de Italia”. Asimismo, recordó que para Hermanos de Italia es “un referente insustituible”, en la medida en que contribuyó a su formación tras un pasado político vinculado en todo momento al neofascismo, informó la cadena RAI.
De hecho, La Russa presumió en 2018 en una entrevista a Il Corriere della Sera de una colección de recuerdos de la dictadura y referencias a Mussolini, en un video que ahora ha vuelto a estar de actualidad por su ascenso al segundo cargo de más autoridad de Italia.
Se da la circunstancia de que la presidencia provisional del Senado en esta sesión inaugural la ocupó, por edad, Liliana Segre, una sobreviviente del Holocausto que invitó a los legisladores a combatir los mensajes de odio, en un discurso interrumpido por lo aplausos en varias ocasiones.
Segre, una senadora vitalicia de 92 años, inició la sesión en la Cámara Alta sustituyendo a un senador más jerárquico que no pudo asistir. Su discurso inició formalmente el proceso que previsiblemente llevará al poder al partido Hermanos de Italia, el más votado el 25 de septiembre y que tiene sus orígenes en un movimiento neofascista. Sería el primer gobierno de extrema derecha en Italia desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
En su discurso, Segre destacó el “valor simbólico” de la coincidencia entre su función y el momento histórico que vive el país. Observó que preside el Senado en vísperas del centenario de la Marcha sobre Roma, que llevó al dictador fascista Benito Mussolini al poder, y cuando vuelve la guerra a Europa con la invasión rusa de Ucrania.
“Hoy me conmueve especialmente el papel que me da el destino”, dijo Segre ante una cámara en silencio. “En este mes de octubre, que marca el centenario de la Marcha sobre Roma que inició la dictadura fascista, me corresponde asumir temporariamente la presidencia de este templo de la democracia que es el Senado de la República”.
Segre fue uno de los pocos niños italianos que sobrevivieron la deportación a un campo de exterminio nazi, y desde hace décadas se dedica a hablar en las escuelas sobre el Holocausto. El Presidente Sergio Mattarella la designó senadora vitalicia en 2018, en el aniversario de la sanción de las leyes de discriminación racial de la era fascista.