Con más del 70% escrutado, los partidos separatistas catalanes renovaron su mayoría en el Parlamento de Cataluña tras unos comicios marcados por la pandemia. El Partido Socialista Obrero Español (PSOE), del presidente español, Pedro Sánchez aparece como la fuerza más votada.
Los lideran los sondeos, con un 23,6% y 33 escaños, pero tendrían complicado desbancar del poder a los independentistas, que gobiernan desde 2015 esta región de 7,8 millones de habitantes.
Tres años después del fallido intento de secesión de octubre de 2017 y a pesar de las fuertes divisiones internas, las tres formaciones separatistas pasan de 70 a 74 escaños de los 135 que tiene el Parlamento regional.
Por detrás de los socialistas, encabezados por el exministro de Sanidad Salvador Illa, se situó con los mismos escaños el partido separatista ERC (21,35%), representante del ala más moderada del movimiento. Esta formación, aliada del ejecutivo minoritario de Sánchez en el Congreso español, consigue adelantar a sus socios de gobierno en Barcelona, Juntos por Cataluña (19,6%, 32 escaños), la formación del expresidente Carles Puigdemont.
Junto con el partido radical CUP (6,6%, 9 escaños), estos tres partidos podrían pactar un gobierno separatista si son capaces de salvar las diferencias mostradas en los últimos años. En cuarta posición entra por primera vez en este Parlamento regional la formación ultraderechista Vox (7,8%), que supera claramente a los dos grandes partidos de derecha a nivel nacional, Partido Popular (3,8%) y Ciudadanos (5,6%).
La imagen de la votación fueron personas infectadas o en cuarentena votando presencialmente, ante un personal electoral cubierto de pies a cabeza con equipos blancos de protección.
Había 5,3 millones de votantes llamados a las urnas en unos comicios celebrados bajo estrictas restricciones para frenar los contagios de coronavirus. Las autoridades instaron a las personas especialmente vulnerables al Covid-19 a votar entre las 9 de la mañana y el mediodía, mientras que la población general debía hacerlo desde el mediodía y hasta las 7 de la noche. Eso dejaba la última hora del proceso, de 7pm al cierre de urnas a las 8pm, para votantes contagiados o en cuarentena debido al contacto reciente con una persona infectada.
Aunque más de 20.000 personas pidieron ser relevadas de sus funciones como trabajadores electorales, que se asignan de forma aleatoria, la votación comenzó sin incidentes en la mayoría de las mesas electorales, según las autoridades. Aun así, algunos ciudadanos a los que se asignaron tareas electorales expresaron su preocupación.