El Servicio Secreto de Estados Unidos ha aprobado un nuevo plan para que el candidato presidencial republicano Donald Trump pueda continuar con sus mitines al aire libre tras el intento de asesinato que sufrió en julio, informó el jueves el Washington Post.
La agencia utilizará cristales antibalas para proteger a Trump, así como otras medidas técnicas de seguridad que normalmente no se han proporcionado a los candidatos presidenciales, según citó el Washington Post a un funcionario no identificado del Servicio Secreto.
El expresidente estadounidense sobrevivió a un intento de asesinato el 13 de julio en un mitin en Butler, Pensilvania.
La seguridad en ese mitin ha estado bajo escrutinio, y el tiroteo ha suscitado serias preocupaciones sobre cómo el sospechoso pudo acceder a una azotea cercana con línea de visión directa hacia donde Trump estaba hablando.
El Servicio Secreto se ha declarado “avergonzado” por el fallo de seguridad y su jefe dimitió tras el intento de asesinato.
El Servicio Secreto no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios sobre el informe del Washington Post.
En el tiroteo murió un asistente al mitin y otras dos personas resultaron heridas. Las autoridades del FBI aún no han identificado el móvil del presunto autor de los disparos, Thomas Crooks, de 20 años, que fue abatido por un agente del Servicio Secreto tras abrir fuego.
Tras el ataque, el Servicio Secreto recomendó a Trump que evitara los grandes actos al aire libre. Posteriormente, Trump dijo que continuaría con los mitines al aire libre y que el Servicio Secreto había “acordado intensificar sustancialmente su operación” para protegerle.