Esta noche, dos atentados suicidas han sacudido a Kabul, capital de Afganistán, dejando un saldo -hasta el minuto- de siete muertos y 20 heridos en dos explosiones. El más reciente ocurrió en una zona de Kabul que alberga la sede la OTAN y las oficinas de varias ONG internacionales, causando un número indeterminado de víctimas, informó una fuente oficial a la agencia EFE. El portavoz de la Policía de Kabul, Hashmatullah Stanekzai, indicó a Efe que la "información preliminar indica que la segunda explosión fue también por un suicida que se disfrazó de periodista con una cámara en la mano" y que habría hecho estallar la bomba en medio de un grupo de reporteros que llegaron a cubrir el primer estallido.

Media hora antes una primera explosión sacudió la misma zona cuando un atacante suicida hizo detonar las bombas que portaba en su motocicleta sobre las 8.00, hora local. Hasta esta hora, ningún grupo se atribuyó de inmediato la autorí­a de los ataques.

El portavoz del Ministerio de Salud Pública de Afganistán, Wahidullah Majroh, indicó que esa la cifra de víctimas que han recibido hasta el momento los hospitales de la zona.

El jefe de la Policía de Kabul, Dawood Amin, afirmó en un mensaje en un grupo de Whatsapp que la segunda detonación se produjo cerca de donde se había reunido un grupo de periodistas para cubrir el primer suceso.

Todavía no está claro cuál fue el objetivo del atentado en Shashdarak, donde se encuentra un complejo de oficinas de la principal agencia de inteligencia afgana, el Directorio Nacional de Seguridad (NDS, en inglés), además de la sede de la OTAN y de varias ONGs internacionales.

Los talibanes rechazaron el pasado miércoles la propuesta de diálogo lanzada a finales de febrero por el Gobierno afgano y anunciaran el inicio de su nueva ofensiva militar de primavera.

Hace una semana, un ataque suicida contra un centro de registro de votantes en el oeste de Kabul, reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), causó 69 muertos y heridas a cerca de 120 personas.

En lo que va de año la capital afgana ha sido objeto de varios atentados, el más importante el perpetrado a finales de enero por los talibanes con una ambulancia bomba que explotó en plena calle en un céntrico barrio de Kabul y mató a más de un centenar de personas.

Tras ese ataque, las autoridades de la capital han revisado todo el plan de seguridad de la ciudad y lo han sustituido para evitar grandes atentados.