Sudáfrica pide a Corte Internacional de Justicia nuevas medidas cautelares contra Israel ante “hambruna generalizada” en Gaza

Las autoridades de Sudáfrica demandaron ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para que amplíe las medidas cautelares que el tribunal dictó contra Israel a finales de enero por su operación militar en la Franja de Gaza, especialmente tras los “últimos acontecimientos” y la “hambruna generalizada” en el enclave palestino.

Sudáfrica señaló que “se ve obligada” a dirigirse de nuevo a la CIJ debido a la alarmante hambruna entre la población gazatí, así como a las “flagrantes violaciones” de la Convención para el Genocidio por parte de Israel y sus “continuas violaciones” de las medidas cautelares dictadas previamente por la corte, reza un comunicado de la Corte Internacional de Justicia.

El escrito sudafricano solicita a la CIJ que ordene nuevas medidas cautelares, o modifique las anteriores, para así “garantizar la seguridad de 2,3 millones de palestinos en Gaza, incluidos más de un millón de niños”. Además, insta al tribunal a abordar este asunto sin celebrar audiencias debido a la “extrema urgencia de la situación”.

Sudáfrica presentó a fines de diciembre ante la CIJ una denuncia contra Israel por supuesto “genocido” de la población de la Franja de Gaza, escenario de una cruenta ofensiva militar que deja ya más de 30.000 muertos y que fue lanzada en origen como respuesta a unos ataques previso del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas).

La CIJ finalmente instó en enero a las autoridades de Israel a adoptar “todas las medidas posibles” para proteger a la población palestina de presuntos abusos contemplados en la Convención sobre Genocidio y garantizar de manera “urgente” que reciben la ayuda necesaria. Estas medidas cautelares no implican un cese inmediato de la ofensiva militar.

Semanas más tarde, las autoridades sudafricanas volvieron a la carga y a mediados de febrero presentaron una “petición urgente” ante la CIJ para que considere se debe “usar sus poderes” para evitar “una inminente violación de los derechos de los palestinos”, a causa de los planes de Israel sobre una ofensiva militar contra la ciudad de Rafah, ubicada en el sur de la Franja de Gaza y hogar de 1,3 millones de personas.