No alcanzó a estar un mes en prisión, pero su arresto tensó a dos países que, en general, tenían buenas relaciones. La periodista italiana Cecilia Sala, de 29 años, fue liberada este miércoles de prisión en Teherán, y el gobierno italiano ya anunció su repatriación: “Nuestra compatriota ha sido liberada por las autoridades iraníes y vuelve a Italia”, precisaron en un comunicado.
“El avión que trae a la periodista Cecilia Sala despegó hace unos minutos”, indicaron desde Roma, sin dar más detalles de la repentina liberación. Reportera de guerra y conocedora de la región, la periodista fue arrestada el 19 de diciembre en Teherán, y se sospecha que se trató de represalias contra Italia.
Tres días antes, el empresario suizo-iraní Mohammad Abedini Najafabadi había sido detenido en el aeropuerto de Milán, sospechoso de tráfico de armas para el régimen iraní. Aunque afirmaba estar en regla respecto a su visado, Cecilia Sala había sido detenida por “violar las leyes” relativas a su estadía profesional en Irán.
Pocos días antes de su arresto, Sala realizaba un podcast para el estudio italiano Chora Media. En esa grabación, comentaba la situación de la humorista de stand-up Zeinab Musavi, condenada a dos años de prisión por videos satíricos. Musavi había publicado en sus redes varias fotografías de mujeres que desafiaban al régimen, negándose a llevar el hiyab.
Se cree que la detención de Sala es una represalia iraní, una forma de tomar una moneda de cambio luego de que Italia arrestara al ingeniero Mohammad Abedini Najafabadi. Esta última detención se hizo a pedido de Estados Unidos, ya que Abedini está acusado de facilitar piezas para fabricar drones, que terminarían siendo usadas por la Guardia Revolucionaria Islámica.
De hecho, Irán reclamaba a Roma la liberación de Abedini, sugiriendo que las condiciones carcelarias de Sala serían equivalentes a las que tuviera el ingeniero en Italia. Distintas organizaciones de derechos humanos han denunciado el encarcelamiento de ciudadanos extranjeros en Irán para obtener la liberación de iraníes.
Uno de los casos más celebres fue el de Olivier Vandecasteele, un trabajador humanitario belga, que fue detenido en Teherán y condenado a 28 años de cárcel sin que se supieran los cargos en su contra. Al final, indicaron en Bruselas, su sentencia fue una represalia por la pena de prisión que se le impuso al diplomático iraní Asadollah Assad, a quien un tribunal de Amberes condenó a su vez a 20 años de cárcel por planear un frustrado atentado con una bomba en Francia. Ambos fueron intercambiados en mayo de 2023, con la mediación de Omán.
Desde su detención, Sala se encontró en aislamiento total en la prisión de Alta Seguridad de Evin, donde son detenidos los disidentes y los prisioneros políticos. En todo este tiempo, la periodista no había visto a nadie, excepto a la embajadora italiana, Paola Amadei, que la visitó una media hora y llevó productos de primera necesidad.
Ya este martes, Sala había podido llamar a su casa y explicar que sus condiciones habían mejorado: le habían pasado una cama, después de casi un mes de dormir en el suelo sobre una manta.
Según el diario La Repubblica, estos últimos dos días se habían acelerado las negociaciones entre Roma y Teherán, con colaboración de Washington. Esto, luego de un viaje exprés de la primera ministra Giorgia Meloni a Mar-a-Lago, la residencia de Donald Trump: el tema de las conversaciones entre ambos se mantiene en secreto, pero es probable que la liberación de Sala haya sido discutida.
La misma Meloni fue quien informó de la liberación de Sala a sus padres, con una llamada. “Meloni agradece a todos los que han contribuido a hacer posible el regreso de Cecilia, permitiéndole volver a abrazar a sus familiares y colegas”, indica el comunicado del gobierno italiano, donde la primera ministra resalta el “intenso trabajo” de los canales diplomáticos.
Según Antonio Tajani, ministro de Relaciones Exteriores italiano, Irán habría “separado” los casos de Sala y Abedini. “Los propios iraníes han separado los dos casos”, dijo en una entrevista para el informativo de la televisión pública Rai. Sin embargo, la agencia Ansa indica que el ministro de Justicia Carlo Nordio se reuniría durante el día con Meloni, en miras a una eventual liberación de Abedini.