Un terremoto de magnitud 7,3 sacudió el norte de Filipinas el miércoles, causando algunos daños y provocando que la gente desalojara los edificios de la capital. Aunque inicialmente las autoridades señalaron que no se habían reportado víctimas, con el correr de las horas se informó de al menos una persona fallecida producto del sismo.
Se trata de un trabajador de la construcción que habría quedó atrapado bajo los escombros caídos en La Trinidad, Benguet, situación que finalmente le costó la vida, como infirmó Philstar.
El sismo provocó, además, corrimientos de tierra y daños en decenas de edificios y casas.
El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., conocido como ‘Bongbong’, en tanto, ordenó la movilización de equipos de rescate y ayuda del Departamento de Bienestar Social y Desarrollo a las zonas afectadas.
El sismo tuvo su epicentro en una zona montañosa de la provincia de Abra, y se habían registrado varias réplicas, según informó el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología.
El terremoto fue provocado por el movimiento de una falla local a una profundidad de 25 kilómetros, dijo el instituto. Añadió que se tienen previstos más daños y réplicas.
Las autoridades señalaron que las fuertes sacudidas causaron grietas en edificios y casas.
El Servicio Geológico de Estados Unidos indicó que la magnitud del terremoto fue de 7,0 y tuvo una profundidad de 10 kilómetros. Los sismos de menor profundidad suelen causar más daños.
Filipinas se encuentra a lo largo del Cinturón de Fuego del Pacífico, un arco de fallas en el océano Pacífico donde se producen la mayoría de los terremotos del mundo. Filipinas también recibe unos 20 tifones y tormentas tropicales cada año, lo que la convierte en uno de los países más propensos a las catástrofes naturales.
En 1990, un terremoto de magnitud 7,7 causó la muerte de casi 2.000 personas en el norte de Filipinas.