Una tormenta invernal que dejó a millones de usuarios sin electricidad en medio de temperaturas históricamente bajas cobró más vidas este martes, incluida las tres personas que fueron localizadas muertas después de que un tornado azotó una localidad costera en Carolina del Norte y las de cuatro integrantes de una familia que fallecieron en un incendio en una residencia del área metropolitana de Houston mientras utilizaban una fogata para mantenerse calientes.
La tormenta que inhabilitó las redes eléctricas y paralizó las actividades en las llanuras del sur, dejó fuertes nevadas y lluvias gélidas desde Nueva Inglaterra hasta el sureste de Estados Unidos, donde provocó temperaturas extremadamente bajas. Se emitieron alertas por factor de congelamiento desde México a Canadá.
En total, se reportaron hasta el momento 15 muertos en Estados Unidos. Entre algunas de las causas de fallecimientos hubo accidentes de tránsito y envenenamiento por monóxido de carbono. El clima también afectó las tareas de vacunación contra el Covid-19 en el país. El gobierno del presidente Joe Biden señaló que es posible que se registren demoras en el traslado y entrega de vacunas.
El condado de Brunswick, en Carolina del Norte, no puso atención suficiente al clima y no emitió una alerta de tornado hasta que la tormenta ya había tocado suelo.
El Servicio Nacional de Meteorología quedó “muy sorprendido por lo rápido que se intensificó la tormenta (...) y en horas de la noche en que la mayoría de las personas ya están acostadas en sus casas, se crea una situación muy peligrosa”, dijo el director de Servicios de Emergencia, Ed Conrow.
En Chicago las nevadas que alcanzaron los 46 centímetros obligaron a las escuelas públicas a cancelar las clases presenciales el martes. Horas antes, a lo largo del generalmente cálido Golfo de México, el esquiador Sam Fagg encontró nieve en la playa de Galveston, Texas.
Los peores apagones en Estados Unidos se registraron en Texas, donde afectaron más de 4 millones de viviendas y negocios. Más de 250.000 personas también se quedaron sin luz en partes de los Apalaches, y una cifra similar sufrió afectaciones tras una tormenta de hielo en el noreste de Oregon, según poweroutage.us, sitio web que rastrea los reportes de empresas de servicios públicos. En México, alrededor de cuatro millones de personas se quedaron sin suministro eléctrico.