Cuando el sindicalismo aún no se posiciona de manera definitiva sobre cómo reaccionar ante la victoria de Javier Milei en el balotaje, el electo mandatario de Argentina aboga por la política de que “todo lo que pueda estar en manos del sector privado, va a estar en el sector privado”. En ese paquete, según detalló en una entrevista, incluirá YPF, medios de comunicación públicos, y ahora a la compañía de agua y saneamiento (AySA), ferrocarriles, e incluso puso en duda el pago del aguinaldo, lo que está regulado por ley.

Sin embargo, algunos sindicatos salieron a contestar de manera directa y confrontacional. “La motosierra de Milei empieza por el aguinaldo y no por la casta”, lanzó el secretario general adjunto de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) nacional, Rodolfo Aguiar. “No es muy promisorio que se empiece a hablar de privatizaciones y desguace del Estado. ATE, como a lo largo de toda su historia, deberá una vez más estar a la altura de las circunstancias y defender los derechos adquiridos de todos los trabajadores”, agregó,

Integrantes de organizaciones sociales protestan contra el presidente electo de Argentina, Javier Milei, afuera de la Casa Rosada, en Buenos Aires, el 23 de noviembre de 2023. Foto: Reuters

Por su parte, los dirigentes que integran la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) se reunieron este jueves para analizar el resultado electoral del domingo y los primeros anuncios realizados por Milei. Según la agencia Télam, expresaron su “preocupación” frente al anuncio de concretar un “ajuste fiscal, puntualmente en la paralización de las obras públicas”, y advirtieron sobre posibles futuras “medidas” de fuerza.

“Si avanzan sobre los derechos sindicales, vamos a tomar medidas”, dijo el cotitular cegetista Héctor Daer. También aseguró que “son intocables los medios públicos de comunicación, más allá de quien gobierne”, en referencia a los proyectos para privatizarlos que ya adelantó Milei.

Al respecto, el secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina de los Trabajadores (CTA) y diputado nacional, Hugo Yasky, recordó que las medidas que propone Milei y que implican afectar al patrimonio nacional, “tienen que pasar por el Parlamento”.

Respecto a la privatización de YPF y de los medios públicos y la derogación de la ley de alquileres, que el presidente electo planteó, Yasky consideró que “sería un retroceso enorme para la Argentina y sería el indicio de que hay un gobierno dispuesto a saquear al país”.

El cruce más fuerte, sin embargo, se dio luego de que Milei planteara que existe la posibilidad de “entregar Aerolíneas Argentinas a sus empleados”, además de desarrollar una política de cielos abiertos, propuestas que Pablo Biró, titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, cuestionó duramente.

“Si se quiera cargar Aerolíneas, nos va a tener que matar. Y cuando digo matar, literalmente; nos va a tener que cargar muertos. Que me anote primero”, dijo en una entrevista con Radio Nacional Rock. “Si nos quiere meter en cana y abolir el derecho de huelga, detenernos, perseguirnos y gobernar por decreto... será Fujimori, la historia lo juzgará y terminará en cana”, prosiguió.

La propuesta del mandatario electo, que asumirá el próximo 10 de diciembre, provocaría que la empresa estatal de aerolíneas deje de recibir subsidios, detalló Clarín. Si bien Biró salió tras unas horas a rectificar su frase –supuestamente, fue con una postura conciliadora–, revela el complejo futuro que le podría deparar a Milei en su relación con los poderosos sindicatos argentinos.

Cajas frías con dosis de la vacuna Sputnik V son cargadas en un avión de Aerolíneas Argentinas en el aeropuerto de Sheremetyevo, Moscú, en diciembre de 2020. Foto: Reuters

“Los aeronáuticos no tenemos un buen futuro con este tipo de planes y estaremos alerta de lo que ocurra cuando Milei asuma el cargo”, dijo el martes el secretario general de la asociación, Edgardo Llano.

Pablo Biró, en tanto, que lidera un gremio de 1.800 afiliados, salió a retractarse de sus palabras iniciales unas horas después de decirlas. En conversación con América 24, el piloto admitió que su frase fue “muy poco feliz, porque necesitamos armonía. El 55% de la población votó pidiendo un cambio y no puede alguien que todavía no asumió tener los caballos encima si todavía no dijo qué piensa hacer”.

En su defensa, aseveró que “quería transmitir prudencia y me equivoqué porque no soy buen comunicador y terminé diciendo mirá, si todo eso sucede y nos dejan sin laburo y otra vez como con los privados no cobramos salarios, se roban los aviones y todo... ya nos reprimieron, nos dieron palazos y nos van a tener que matar a palazos”. Y cerró: “Disculpen la vehemencia, me rectifico si agravié a alguien con mis dichos”.