Luego de que Naciones Unidas confirmara la visita de la Alta Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet a Venezuela -depués del 10 de enero, fecha en que Nicolás Maduro asumirá nuevo período hasta 2025- un grupo de ex embajadores venezolanos en ese organismo recomendaron a la expresidenta postergar la visita a Caracas.
A través de una carta los diplomáticos Diego Arria, Milos Alcalay y Victor Rodríguez Cedeño expresaron su preocupación sobre la necesidad se establecer una "serie de condiciones" antes de concretar su viaje Venezuela. "Una visita sin condiciones limitantes permitiría constatar la realidad de los derechos humanos en Venezuela, hoy sumergida en la crisis más grave de su historia, una crisis no sólo política, sino económica y social que se traduce en una auténtica tragedia humanitaria".
En ese sentido, expresan su preocupación porque su "visita pudiese ser interpretada y utilizada como un reconocimiento a un gobierno ilegitimo y cuestionado por una amplia mayoría de la comunidad democrática mundial". Esto, debido a la última declaración firmada por 13 países del Grupo de Lima - entre ellos Chile - que declararon que no reconocerán el nuevo gobierno de Maduro y se sugiriera revaluar sus relaciones diplomáticas.
Para los cancilleres del organismo regional la nueva toma de posesión de Maduro significa "una situación muy particular y grave en el país que se podría traducir en un auténtico vacío constitucional", y por ello recomendaron que la visita "sea postergada hasta que las condiciones políticas e institucionales en el país lo permitan y que la misma pueda realizarse en las condiciones de absoluta transparencia y objetividad".