El Presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el viernes la cancelación abrupta de las sanciones impuestas por el propio Departamento del Tesoro de EEUU contra dos navieras chinas para reforzar la presión internacional sobre Corea del Norte. "Fue anunciado hoy por parte del Tesoro de los Estados Unidos que se iban a agregar sanciones a gran escala adicionales a las existentes contra Corea del Norte. ¡Hoy he ordenado el retiro de esas sanciones adicionales!", dijo Trump en su cuenta de la red Twitter.

El mandatario pareció estar refiriéndose a las medidas reveladas el jueves que apuntaban a dos compañías chinas acusadas de ayudar a Corea del Norte a evadir las estrictas sanciones internacionales destinadas a presionar a Pyongyang para que ponga fin a su controvertido programa de armas nucleares. Pero el diario The Washington Post informó, citando a funcionarios de la administración Trump, que el tuit del presidente hacía referencia a sanciones futuras que no se habían anunciado y estaban programadas para "los próximos días".

Las sanciones del jueves fueron el primer nuevo signo de presión desde que las conversaciones entre Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un, en Hanoi hace menos de un mes, fracasaron. Trump, quien anteriormente ha hablado de "amor" por el líder norcoreano, parece retener la esperanza de que la sólida relación personal que ambos mantienen fructifique.

"Al presidente Trump le cae bien el presidente Kim y no cree que estas sanciones sean necesarias", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders. Adam Schiff, un legislador demócrata que encabeza el comité de inteligencia de la Cámara de Representantes, criticó a Trump por cancelar las sanciones "impuestas ayer y defendidas por su propio asesor de seguridad nacional, porque 'ama' a Kim". "La tonta ingenuidad es bastante peligrosa. La gran incompetencia y el desorden en la Casa Blanca lo empeoran aún más", escribió Schiff en su cuenta de Twitter. China se había quejado, argumentando que hizo cumplir todas las resoluciones de la ONU, y manifestó su oposición a "cualquier país que imponga sanciones unilaterales y tome la jurisdicción de largo alcance contra cualquier entidad china de acuerdo con sus propias leyes nacionales".