El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aprobó este viernes la declaración de “estado de desastre” para California por los históricos incendios que han arrasado cientos de miles de hectáreas en la región en los últimos meses.

Con esta decisión los individuos afectados por aquellos incendios que comenzaron el pasado 4 de septiembre podrán optar a financiación de fondos federales como ayudas para conseguir un domicilio temporal o reconstruir su casa o préstamos a bajo interés para cubrir propiedades perdidas sin asegurar, según explicó la Casa Blanca en un comunicado.

Asimismo, también se ha especificado que los fondos federales estarán disponibles para las distintas entidades gubernamentales, los negocios y las organizaciones sin ánimo de lucro siempre que estén destinados a reparar daños y tomar medidas protectoras para evitar futuras emergencias.

La aprobación llega tras una puja política entre el Estado, de mayoría demócrata, y el presidente republicano que el jueves había denegado la petición para declarar el estado de desastre en la región.

Desde el comienzo de la temporada de incendios, 1,6 millones de hectáreas se han quemado en California, lo que ha causado 31 fallecimientos y unos daños materiales que se estiman en más de 230 millones de dólares (196 millones de euros) y 9.200 estructuras destruidas.

Entre los principales focos, destaca especialmente el de Creek, que con 138.000 hectáreas calcinadas es el más grande de la historia de California.