Las autoridades de Ucrania han denunciado este domingo que cerca de 40 niños han muerto y más de 70 han resultado heridos desde el 24 de febrero, fecha en la que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó el inicio de una ofensiva militar contra el país.

La comisionada para Derechos Humanos del país, Liudmila Denisova, ha resaltado a través de un mensaje en Telegram que hasta la fecha se ha confirmado la muerte de 38 niños, mientras que 71 han resultado heridos, si bien ha dicho que “esta cifra no es final, ya que es imposible lograr información precisa sobre el número de muertos y heridos en Mariúpol, la región de Donetsk e Irpin”.

“Durante el último día ha muerto un niño de un año y medio como resultado de un ataque con proyectiles de los ocupantes rusos en Mariúpol”, ha detallado, antes de agregar que “en Bucha, dos niños heridos en estado grave murieron ante la ausencia de atención médica”.

Asimismo, Denisova ha reseñado que “cuando salían de Irpin, en la región de Kiev, las tropas rusas abrieron fuego contra civiles cuando intentaban evacuar la ciudad”. “Murieron al menos tres personas, incluidos dos niños”, ha añadido, antes de agregar “las Fuerzas Armadas de Rusia siguen violando gravemente los derechos fundamentales de los niños”.

“Pido a las organizaciones humanitarias internacionales que adopten todas las medidas posibles para incrementar la presión contra Rusia para que ponga fin a la agresión militar contra Ucrania”, ha zanjado. La invasión empezó días después de que Rusia reconociera la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk.

Por otra parte, la Fiscalía de Kiev ha denunciado este mismo domingo la muerte de seis civiles por disparos de las fuerzas rusas durante la jornada del sábado en la aldea de Jasnogforodka, en el distrito de Kiev. El suceso se saldó con otro civil herido.