El gobierno ucraniano lanzó el miércoles una nueva iniciativa para agilizar y promover la innovación en el desarrollo de drones y otras tecnologías que han sido fundamentales en la guerra contra Rusia.
Como parte de la iniciativa apodada BRAVE1, el gobierno aspira a reunir expertos de los sectores estatal, militar y privado para que trabajen juntos en cuestiones de defensa en un centro tecnológico capaz de darle ventaja a las tropas de Ucrania en el campo de batalla.
“Considerando la proximidad y el tamaño de nuestro enemigo, definitivamente necesitamos desarrollar la tecnología militar para defendernos”, declaró Mykhailo Fedorov, ministro de Transformación Digital de Ucrania.
Fedorov dijo que el gobierno había designado más de 100 millones de grivnas (unos 2,7 millones de dólares) para financiar proyectos que tienen el potencial de ayudar a Ucrania a ganar la guerra.
“Hay muchas personas ahora en el frente de batalla de la generación joven que pueden trabajar con tecnología, y las necesitamos”, añadió el ministro.
El nombre del grupo tecnológico de defensa hace referencia la valentía que Ucrania ha mostrado durante la guerra que Rusia empezó, dijo el ministro de Defensa, Oleksii Reznikov, durante la presentación.
Declaró que Ucrania busca independencia en su capacidad militar y que BRAVE1 puede ser un paso hacia el logro de ese objetivo. La semana pasada, Reznikov se reunió en Alemania con expertos en defensa de todo el mundo para coordinar el envío de más ayuda militar a Ucrania.
“No debemos depender de la voluntad de nuestros socios”, expresó. “Tenemos que invertir recursos en nuestra independencia para poder defendernos por nuestra cuenta”.
La presentación se realizó en un estacionamiento subterráneo e incluyó tecnologías ucranianas que ya se están usando en el campo de batalla, como vehículos terrestres no tripulados, sistemas robóticos para detectar minas y sistemas aéreos no tripulados.
Tanto Ucrania como Rusia usan frecuentemente los vehículos aéreos no tripulados para reconocimiento y ataques. Rusia ha usado a gran escala los drones explosivos iraníes Shahed-136 para atacar instalaciones eléctricas y sembrar terror entre la población civil. El gobierno ucraniano lanzó el año pasado una campaña de recaudación de fondos para crear “un ejército de drones”.