Al menos 17 misioneros cristianos estadounidenses y sus familias fueron secuestrados este sábado por una banda criminal en Haití, según informó el diario estadounidense ‘The New York Times’ citando a funcionarios de seguridad de la nación centroamericana.

Los enviados fueron bajados de un autobús en Puerto Príncipe, cuando se dirigían rumbo al aeropuerto. Entre los afectados hay niños y mujeres, confirmaron las autoridades del país.

Hace unos días, la administración estadounidense anunció que destinará 15 millones de dólares -cerca de trece millones de euros- con el fin de “ayudar a reducir la violencia” en Haití y garantizar la aplicación de la ley.

El país se encuentra inmerso en un estado de inestabilidad agravado por las secuelas del terremoto del pasado 14 de agosto que dejó más de 2.000 muertos, y del asesinato del presidente Jovenel Moise por un grupo de mercenarios, crimen ocurrido el pasado 7 de julio.

Según la ONG Acción contra el Hambre, más de cuatro millones de personas en Haití dependen de la asistencia humanitaria para comer o satisfacer sus necesidades básicas.