Con la ausencia de Andrés Manuel López Obrador de la Cumbre de las Américas, el presidente argentino ganó un protagonismo particular. Como uno de los aliados del mandatario mexicano, y en su condición de presidente pro tempore de la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), Alberto Fernández se volvió una especie de representante de los gobiernos progresistas de Latinoamérica en la cita de Los Ángeles.

Según fuentes de la Casa Rosada citadas por Infobae, Fernández presentará una propuesta en la cumbre, para “una verdadera integración sin exclusiones”. Los excluidos, en este caso, fueron Cuba, Venezuela y Nicaragua, que el gobierno de Joe Biden decidió no invitar a la reunión multilateral que está teniendo lugar en California.

Fernández, según dijeron fuentes cercanas al diario La Nación, no oficiará como “la voz de los excluidos”, algo que había alentado el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. En cambio, planteará un modelo de integración diferente, indicó el medio transandino.

Por el Día del Periodista, Fernández hizo una conferencia de prensa en la Casa Rosada, donde dejó clara su posición respecto al tema: “Vamos a defender los derechos de la América Latina y la unidad de Latinoamérica. La unidad no se declama, se ejerce. Y la mejor forma de ejercerla es no segregar a nadie. Lamentamos la no presencia de países, pero intentaremos llevar su voz a ese foro”.

Alberto Fernández, en una conferencia de prensa en el Palacio Nacional, Ciudad de México. Foto: Reuters

En un principio, no iba a ir: cuando se supo que los presidentes Cuba, Venezuela y Nicaragua no fueron invitados a la Cumbre de las Américas, Fernández pensó seriamente en seguir los pasos de su par mexicano y no aceptar la invitación de Biden. De hecho, por un momento llegó a evaluarse la idea de una “contracumbre”, pero una conversación telefónica detuvo las gestiones: luego de evaluarlo con AMLO, el presidente argentino llegó a la conclusión de que un boicot tan grande a la cumbre desgastaría demasiado la imagen de Joe Biden, y que terminaría fortaleciendo a su principal adversario político, el expresidente Donald Trump, según destaca el portal La Política Online.

Como presidente pro tempore de la Celac, Fernández llegó al trato con AMLO de “llevar la voz de los excluidos” a Los Ángeles. Desde Caracas, el papel fue elogiado públicamente por Nicolás Maduro: “Sabemos que su voz firme, clara y valiente será una de las más poderosas, para cuestionar la exclusión e intento de división de América Latina y el Caribe, con esta política errática del gobierno de Estados Unidos”.

Ayer, la solicitud se volvió más explícita por parte del presidente de Venezuela. “La Celac, Presidente Alberto Fernández, presidida por usted, debe convocar una agenda de temas prioritarios y de máximo interés para nuestros pueblos a una reunión cumbre, donde vayamos los 33 países de América Latina y el Caribe, y sea invitado el Presidente Joe Biden a escuchar la dignidad de nuestros pueblos y de nuestras historias”, señaló el mandatario desde el Palacio de Miraflores.

Gabriel Boric y Alberto Fernández, en la Casa Rosada, Buenos Aires. Foto: AFP

Según fuentes del gobierno argentino, Fernández participará en la cumbre para hablar sobre cuestiones como “las consecuencias de la guerra de Ucrania en la región, y la necesidad de tener una América Latina unida y sin exclusiones, promoviendo una agenda positiva de desarrollo económico para todos nuestros pueblos”, señaló el diario brasileño O Globo: “Argentina va a participar de la reunión para dejar clara su posición”, apuntó el medio, tras asegurar que Fernández se volvió “una especie de representante y portavoz de los gobiernos de izquierda y progresistas de la región”. En medio de la cumbre, el mandatario sostendría encuentros bilaterales con sus pares de Chile, Perú, Canadá y Estados Unidos.

La visión que comparten tanto Fernández como López Obrador es que las desigualdades sociales que afectan la región no pueden ser combatidas bajo la idea de una nueva guerra fría. Ambos defienden una necesidad de iniciar una nueva etapa de diálogo que incluya a todos los países del continente. En esa dirección, ya el lunes el mandatario transandino cuestionaba el bloqueo económico a Cuba. “La verdad es que, en medio de una pandemia, el mantener los bloqueos es la cosa menos humanitaria que existe”, criticó Fernández.

Del mismo modo, el rol que jugaron México y Argentina durante el exilio de Evo Morales los hace cuestionar fuertemente a la Organización de Estados Americanos, y a su secretario general Luis Almagro. El canciller Santiago Cafiero, que viajó a Los Ángeles junto a Fernández, declaró para el diario La Nación: “La OEA como plataforma política regional nunca más puede estar comprometida en legitimar procesos de desestabilización y alteración del orden democrático, como pasó en Bolivia”.

Por esto mismo, el presidente pro tempore de la Celac buscará otros caminos para promover el diálogo entre los países americanos.

Jair Bolsonaro habla durante una ceremonia en el Palacio de Planalto en Brasilia. Foto: Reuters

En tanto, la comitiva brasileña liderada por Jair Bolsonaro llega a la cumbre con una “actitud constructiva” y la intención de “tratar temas importantes para toda la región, entre ellas el crecimiento, la pobreza, la desigualdad y la inversión”, explicó el embajador Pedro Miguel da Costa e Silva, secretario de las Américas en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.

A diferencia de otros países, el embajador dejó claro su posición respecto a los gobiernos excluidos. “Brasil respeta los criterios del anfitrión”, señaló.

Después de que Bolsonaro fuese uno de los últimos en reconocer la victoria de Joe Biden en 2020, la relación entre Washington y Brasilia había empeorado sustancialmente, y desde Brasil se había hecho un trabajo minucioso para recomponer la relación. Hasta el momento, faltaba el encuentro presencial de Biden y Bolsonaro. Este último llegará el jueves a Los Ángeles, perdiéndose el primer evento de la cumbre, destaca la prensa brasileña.

El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, saluda mientras aborda el Air Force One, para asistir a la Cumbre de las Américas en Los Ángeles. Foto: AP

Además de las ausencias originales -las de Cuba, Venezuela y Nicaragua-, y las ausencias reactivas -México, Bolivia, Honduras y San Vicente y las Granadinas-, el Presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, no podrá asistir finalmente a la Cumbre de las Américas: no por desacuerdo con las exclusiones, sino porque se contagió de Covid-19.