El presidente de la Comisión de la Unión Africana, Musa Faki Mahamat, manifestó este martes que “lamenta” la salida de Rusia del acuerdo de exportación de grano desde los puertos de Ucrania, que se alcanzó por primera vez en julio de 2022, en el marco de la invasión rusa.
“Lamento la suspensión de la Iniciativa del mar Negro para el transporte de cereales, de la que la Unión Africana había sido uno de los primeros defensores”, señaló Mahamat a través de Twitter.
El también exprimer ministro de Chad (2003 - 2005) instó a “las partes a que resuelvan cualquier problema para reanudar el transporte seguro de cereales y fertilizantes desde Ucrania y Rusia hasta donde se necesitan, especialmente en África”.
El día anterior, el Gobierno de Kenia afirmó que la decisión de Moscú de poner fin al acuerdo con Ucrania para la exportación de grano es “una puñalada por la espalda” a la seguridad alimentaria que afecta especialmente a países afectados por la sequía.
“La decisión de Rusia de salirse de la Iniciativa de Grano en el Mar Negro es una puñalada por la espalda a los precios globales de seguridad alimentaria e impacta de forma desproporcionada al Cuerno de África, ya afectada por la sequía”, dijo entonces el secretario general del Ministerio de Exteriores keniano, Korir Sing’Oei.
Rusia puso fin al acuerdo de exportación de grano por el supuesto incumplimiento del mismo por parte de Ucrania y agregó que las partes habían sido notificadas, entre ellas Naciones Unidas, a quien se ha trasladado las argumentos de Moscú para negarse a prorrogar el acuerdo.
Así, aclaró que la expiración del acuerdo implica el cierre del corredor humanitario marítimo en el noroeste del mar Negro y la disolución del centro conjunto de coordinación de Estambul, creado a raíz del pacto. Además, Moscú ha retirado las garantías de seguridad para la navegación en las inmediaciones.
El acuerdo de exportación de grano se alcanzó hace un año en la ciudad turca de Estambul con la mediación de las autoridades turcas y Naciones Unidas. El pacto permitía exportar cereales ucranianos y productos agrícolas rusos a través de los puertos del mar Negro y del estrecho del Bósforo, si bien Rusia ha denunciado que las exportaciones de sus fertilizantes no cumplieron como se recogía en el acuerdo original.