El Consejo Europeo anunció este jueves la decisión de extender por un año, hasta noviembre de 2021, las sanciones contra Venezuela, “a raíz de la continuada crisis política, económica, social y humanitaria”.

En una breve nota oficial, el Consejo señaló que a esa situación se añaden “acciones persistentes contra la democracia, el estado de derecho y el respeto por los derechos humanos”.

Las sanciones cuya aplicación se extendieron por un año incluyen el embargo a la venta de armas y equipos de represión, así como congelamiento de eventuales activos de 36 funcionarios a quienes la UE responsabiliza por violaciones de derechos humanos o “ataques a la democracia y el estado de derecho”.

Esos 36 funcionarios tienen también vetado el ingreso al territorio europeo.

La decisión de extender las sanciones será publicada en la edición del viernes del diario oficial de la UE.

“Estas medidas están destinadas a ayudar a impulsar soluciones democráticas, con el fin de lograr estabilidad política al país y permitirle atender las necesidades apremiantes de la población”, señaló el Consejo en una nota.

A inicios de octubre, el bloque europeo declinó enviar una misión de observación a las elecciones previstas en Venezuela para el 6 de diciembre.

La UE alegó que no habría tiempo de preparar tal visita de una misión de observación y trató, sin éxito, de convencer al gobierno de Nicolás Maduro de postergar las elecciones por un plazo de cinco a seis meses.

La grupo de los 26 no acepta el resultado de las elecciones que marcaron la reelección de Maduro, en 2018, y solamente reconoce la autoridad de la Asamblea Nacional, conducida por Juan Guaidó.

En octubre, un diplomático europeo adelantó que si Venezuela insistía en realizar las elecciones del 6 de diciembre la UE “no reconocerá ninguna institución, ni la Asamblea Nacional y la Suprema Corte”.

Para el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, el gobierno de Maduro carece de “legitimidad democrática”.