Luego de tres días de intensas negociaciones, dos mujeres fueron nominadas para presidir los más altos cargos de la Unión Europea, rompiendo con más de 60 años de hegemonía masculina en el bloque comunitario. Ursula von der Leyen, actual ministra de Defensa alemana, fue elegida como nueva presidenta de la Comisión Europea (CE) para los próximos cinco años, mientras que Christine Lagarde, que hasta hoy lideraba el Fondo Monetario Internacional (FMI), estará al frente del Banco Central Europeo (BCE).
Los Veintiocho designaron también al primer ministro belga, el liberal Charles Michel, como presidente del Consejo Europeo; al ministro de Exteriores español en funciones, el socialista Josep Borrell, como vicepresidente de la CE y alto representante para la política exterior de la Unión Europea.
Las nominaciones deben recibir el respaldo del Parlamento Europeo, aunque en el caso del BCE la opinión de la Eurocámara es solo consultiva. Tampoco el Parlamento decide sobre el Presidente del Consejo Europeo debido, a que es potestad exclusiva del Consejo, institución que representa a los Estados miembros de la Unión Europea.
Según la agencia EFE, el puesto de presidente socialdemócrata de la Eurocámara podría recaer sobre el eurodiputado búlgaro y actual presidente del Partido Socialista Europeo (PES), Sergueï Stanichev, para satisfacer a los países del este y mantener el equilibrio geográfico que, junto al de género y al político, eran los tres criterios principales en el reparto de cargos.
Los nuevos altos cargos del bloque sustituirán al conservador luxemburgués Jean-Claude Juncker en la CE, al conservador polaco Donald Tusk en el Consejo, a la socialdemócrata italiana Federica Mogherini como jefa de la diplomacia europea y al italiano Mario Draghi en el BCE.
Toque conservador
Fue el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien propuso a Ursula von der Leyen para que liderara la Comisión Europea. La ginecóloga alemana solo llegó a la política cuando ya había cumplido cuarenta años y, a menudo, aparece en los sondeos de Alemania como la política más popular del país. Ocupa desde 2014 la cartera de Defensa en Alemania e ingresó a la Unión Cristiano Demócrata (CDU) en 1990, el mismo partido que la canciller Angela Merkel. Tiene siete hijos y entre sus políticas, destaca el diario The Guardian, se encuentra la mejora de los beneficios de maternidad y paternidad cuando ejerció como ministra de Asuntos de Familia. Además, impulsó cuotas de género en los directorios. Von der Leyen creció en Bruselas y ha defendido la idea de los "Estados Unidos de Europa".
Por su parte, la francesa Lagarde -que este martes renunció temporalmente al FMI- otorgará un perfil político al BCE. Su nombre fue una sorpresa porque no se encontraba en las apuestas. El diario El País señala que su elección "supone una victoria diplomática para Francia, que consigue colocar de nuevo -ya ocupó la presidencia de la institución otro francés, Jean-Claude Trichet- a uno de los suyos en uno de los puestos clave de la Unión Europea y, de paso, reafirmar su 'diplomacia feminista'".