Es sindicado como uno de los mayores represores del régimen venezolano. Así al menos lo retrata la oposición y organismos como Human Rights Watch. Gustavo González López, que volvió a asumir la dirección del aparato de inteligencia venezolano (Sebin), es tan temido como odiado por el antichavismo.
"El nombramiento de Gustavo González López como director del Sebin debería encender las alarmas internacionales ante el riesgo de mayores abusos. Cuando González López dirigió el Sebin, sus agentes participaron en arrestos arbitrarios y torturaron a detenidos", advirtió el director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco.
González retomó sus funciones esta semana después de la destitución del general Manuel Ricardo Cristopher Figuera, que estaba a cargo del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), hasta que fue acusado de conspirar para la liberación de Leopoldo López.
El nuevo jefe de la inteligencia ya ocupó ese cargo entre 2014 y 2018, año en que fue destituido luego del presunto suicidio del concejal Fernando Albán en las dependencias del Sebin.
Conocido como "El Sabueso", González forma parte del círculo de hierro de Diosdado Cabello, "número dos" del chavismo.
