El volcán Kilauea de Hawái entró otra vez en erupción en las últimas horas, después de tres semanas de la primera explosión, amenazando ahora una planta geotérmica que suministra el 25 % de la energía de la isla.
La última erupción ocurrió hacia las 17.51 hora local del lunes de acuerdo a un informe del Observatorio de Volcanes de Hawái del Servicio Geológico de EE.UU. (USGS, por su siga en inglés).
La Agencia de Defensa Civil del condado de Hawái alertó en un comunicado de que la lava que brotó de la fisura 22 traspasó una planta geotérmica que suministra aproximadamente el 25 % de la energía para los residentes de la isla.
Además, los funcionarios temen ahora que si la lava fluye hacia uno de los pozos de la planta podría provocar la liberación de sulfuro de hidrógeno, un gas "peligroso" para las personas.
"Los residentes en el área afectada deberían estar preparados para abandonar el área con poco aviso debido a una inundación de gas o lava. Tome las medidas necesarias para prepararse antes de tiempo", señaló Defensa Civil en ese aviso.
Por otro lado, la agencia estatal explicó que la actividad eruptiva en "múltiples fisuras" de la región continúa produciendo un flujo de lava que ha llegado en las últimas horas al océano Pacífico.
Esta llegada de la lava caliente al océano podría contaminar el aire con una sustancia conocida en inglés como laze, por la combinación de las palabras "lava" y "haze" ("neblina").
Ese fenómeno, en forma de nube blanca, envía al aire partículas de cristal fino y ácido clorhídrico, que son desplazadas por el viento y "pueden cambiar de dirección sin aviso previo", y que pueden provocar "irritación de los pulmones, los ojos y la piel".
El volcán Kilauea entró en erupción por primera vez el pasado 3 de mayo tras varios días de registrarse terremotos de magnitud 5,0 grados en la zona.