El Presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo este lunes que Vladimir Putin es el único funcionario ruso con el que está dispuesto a reunirse, con un único tema en la agenda: detener la guerra.
Zelenski, dirigiéndose por enlace de video a una audiencia en el Foro Económico Mundial de Davos, expresó también que organizar cualquier tipo de conversaciones con Moscú es cada vez más difícil a la luz de lo que, según él, son pruebas de las acciones rusas contra los civiles.
Rusia niega haber atacado a civiles en lo que llama una “operación especial” para degradar las capacidades militares de Ucrania.
“El Presidente de la Federación Rusa lo decide todo”, dijo Zelenski a través de un intérprete. “Si estamos hablando de poner fin a esta guerra sin él personalmente, esa decisión no se puede tomar”.
Zelenski afirmó que el descubrimiento de asesinatos en masa en áreas ocupadas por las tropas rusas a principios de la guerra, particularmente fuera de Kiev, hizo más difícil concertar conversaciones y descartaría cualquier discusión con otros funcionarios.
“No puedo aceptar ningún tipo de reunión con nadie que venga de la Federación Rusa excepto el Presidente”, dijo. “Y solo en el caso de que haya un tema sobre la mesa: detener la guerra. No hay otros motivos para ningún otro tipo de reunión”.
Los negociadores rusos y ucranianos han sostenido conversaciones esporádicas desde que las fuerzas rusas invadieron Ucrania a fines de febrero, pero ambas partes dicen que las conversaciones se han estancado.
Zelenski dijo en la televisión ucraniana la semana pasada que era imposible detener la guerra sin algún tipo de diplomacia.
En sus comentarios a la audiencia en Davos, Zelenski también afirmó que la guerra tuvo un alto precio humano para los ucranianos. Las fuerzas del país, dijo, estaban logrando avances, en particular cerca de la ciudad de Járkov, pero “la situación más sangrienta permanece en Dombás, donde estamos perdiendo demasiadas personas”.
También aseguró que cualquier idea de recuperar por la fuerza la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014, causaría cientos de miles de víctimas.