Este domingo, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) realizó un nuevo balance de la situación de los incendios forestales en el país, siniestros que se intensificaron a inicios de febrero en la zona centro-sur y que han cobrado la vida de 26 personas y han dejado al menos 430.000 hectáreas consumidas por el fuego.
Según detalló el organismo, hasta las 07:40 de esta mañana, 20 incendios forestales continuaban en combate, mientras otros 14 se mantienen bajo observación y 170 han sido controlados.
La catástrofe ha dejado 7.770 personas damnificadas, mientras otras 196 se mantienen en albergues. La cantidad de fallecidos a raíz de los incendios forestales se mantiene en 26 personas.
Desde que se desató la emergencia, 2.450 viviendas han sido destruidas, mientras otras 1.516 se mantienen con daño menor y 514 casas están en evaluación.
En cuanto a los daños, según cifras de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), 433.439,48 hectáreas han sido afectadas por el fuego. De ellas, según precisa el Ministerio de Agricultura, 4.525,2 corresponden a cultivos. En consecuencia, 8.129 productores se han visto afectados.
También se ha registrado el deceso de 24.812 animales y la afectación de 49.920 colmenas.
De momento, la Región del Biobío continúa con alerta roja, misma medida que mantiene una provincia de La Araucanía y una comuna de Magallanes.