A 14 años del rescate de los 33 mineros de la Mina San José en la comuna de Caldera, distintas figuras políticas además de los sobrevivientes del derrumbe se reunieron para homenajear al fallecido expresidente Sebastián Piñera.
La ceremonia comenzó alrededor del mediodía con una eucaristía y contó con la participación del presidente del Senado, José García Ruminot; la ex primera dama, Cecilia Morel; el jefe de turno de los 33 al momento del accidente, Luis Urzúa; el entonces ministro de Minería, Laurence Golborne; la alcaldesa de Providencia y abanderada presidencial de la UDI, Evelyn Matthei; el senador y presidente de Renovación Nacional, Rodrigo Galilea; y la presidenta de Evópoli, Gloria Hutt.
Tras la eucaristía, uno de los mineros, Omar Reygadas dedicó unas palabras a su compañero Mario Gómez, el mayor de los 33, fallecido en septiembre pasado y al exmandatario: “Nos faltan dos personas importantes, nos falta nuestro hermano (Mario Gómez) y nos falta la persona que hizo posible esto, con sus contactos y su gente. Pero sé que están en buenas manos, están con nuestro padre celestial”.
A su vez, Luis Urzúa expresó que “como jefe de turno, me encargaba de mantener la información diaria del trabajo, mejorar la actividad emocional y física de los mineros, apoyar en lo posible para que el Presidente tuviese en su poder la mejor visión de lo que estábamos haciendo o trabajando bajo tierra. Hoy nos reunimos en esta celebración eucarística para rendir un sensible homenaje e instalando una bandera número 34, una alianza eterna de los mineros y de quien fuese un gran líder. La instalación de esta bandera es un acto de fe y de esperanza”.
“Un emotivo homenaje a nuestro compañero Mario Gómez, un minero experimentado, sobreviviente de los cerros y piques. Otros seguirán el camino que dejaste. Descansa en paz, amigo”, agregó Urzúa.
La ex primera dama, por su parte, inició su intervención relatando el día en que el país se enteró de que los mineros habían sobrevivido al derrumbe: “Cómo olvidar ese 22 de agosto, con el famoso papelito. Ese día mi papá estaba moribundo, fallecería horas después, Sebastián (Piñera) estaba ahí a su lado y le había prometido que iba a sacar a los mineros. Y ese llamado glorioso, muy temprano en la mañana, que había hecho Laurence (Golborne) contándole que habían logrado perforar en el refugio. Creo que primero fueron tres golpecitos, algo así, que sintieron en la sonda. Y fue un día de pena por la partida de mi papá, pero también fue muy bonita y muy emocionante esta maravillosa noticia”.
“Este homenaje para mí, para mi familia, para mis hijos, para mis nietos, es de un profundo significado. Sebastián ha tenido muchos homenajes, todos muy lindos, todos muy emocionantes, pero para mí, este es el más importante, sin desmerecer los otros. Aquí está su huella viva. Aquí está lo que él era. Ese liderazgo, esa fuerza, ese coraje, esa convicción de trabajar, trabajar, trabajar, como trabajaron aquí día y noche”, añadió.
Asimismo, instó a los presentes a “seguir el ejemplo del rescate, que se pueda mantener, esa unidad, esa visión, un trabajo colectivo donde no había diferencias políticas, había un gran objetivo: la vida. Esa es la unidad, el trabajo y esa misión compartida que existió para este rescate lo que quisiéramos que fuera el ejemplo para todos los días de nuestra vida en este país”.
La ceremonia -que contó con la asistencia de 13 de los 33 mineros- culminó con la instalación de una placa conmemorativa y la bandera número 34 en memoria del expresidente Piñera.