A un mes del hallazgo de su cuerpo: qué ha pasado con el caso de Anahí Espíndola

El pasado 12 de enero fue encontrado el cuerpo de Anahí Monserrat Espíndola Córdova en los roqueríos de Avenida Perú en Viña del Mar, Región de Valparaíso.

Desde entonces ha pasado un mes exacto, y la investigación por su desaparición y muerte sigue en curso. De hecho, desde el Servicio Médico Legal (SML) confirmaron a La Tercera que el cuerpo de Anahí -hasta este lunes- todavía no es entregado a su familia.

Según el organismo, están a la espera de la orden de Fiscalía para hacer entrega de sus restos.

La joven de 22 años desapareció el 4 de enero a la salida de un gimnasio al que asistía con regularidad, pasadas las 23:00 horas. Desde ese día, una serie de imágenes comenzaron a circular, en las cuales se ve caminar a la estudiante -que había rendido su prueba PAES semanas antes- por algunas calles de Viña del Mar.

En los antecedentes que maneja el Ministerio Público sobre este caso, se ha podido conocer una serie de acontecimientos: Espíndola se encontró con una mujer después de salir del gimnasio, envió una fotografía de sus zapatillas mojadas a su expareja, y desconectó la ubicación de su teléfono, la cual era compartida con sus amigas.

Desde el 12 de enero su cuerpo permanece en el organismo forense, donde se realizan una serie de pericias.

Hasta ahora, la muerte de Anahí y las circunstancias que llevaron al trágico desenlace siguen siendo un misterio. El mismo día que fue confirmado que el cuerpo encontrado correspondía a Anahí, el jefe de la Región de Valparaíso de la PDI, prefecto inspector Guillermo Gálvez, indicó que “no hay ninguna hipótesis que se pueda descartar, pero se están realizando todas las pericias para poder llegar a la verdad y establecer definitivamente el hecho”.

“La causa todavía está en calidad de reservada, por lo tanto, no se pueden entregar mayores antecedentes de los caminos que se están utilizando para llegar a establecer las circunstancias en que falleció Anahí”, agregó en esa oportunidad.

Posteriormente, el pasado 18 de enero la fiscal regional de Valparaíso, Claudia Perivancich, informó que al cuerpo de Anahí se le continuaron realizando exámenes para determinar cómo ocurrió su deceso. “Por ahora, lo que estamos esperando es el resultado científico de la causa de muerte”, afirmó la persecutora.

Sin embargo, precisó que “yo no voy a elucubrar sobre la causa de muerte, pero ninguno de los antecedentes que tenemos en la investigación nos permite siquiera presumir que haya intervención de terceros”.

Consultada sobre si se baraja la posibilidad de que el deceso haya correspondido a un accidente, la fiscal señaló: “Esa es una posibilidad”.

Además de eso, el Ministerio Público investiga su muerte con perspectiva de género para descartar que no haya ocurrido un femicidio.

El 30 de enero, la madre de Anahí, Dura Córdova, hizo un inesperado llamado en medio de la conmoción pública que generó el caso: “Por favor, les pido que no pidan justicia, porque no es justicia lo que necesitamos, porque la justicia hasta ahora ha estado de la mano de nosotras en cada segundo”.

“Nos han ayudado en absolutamente todo, se han abierto todas las puertas. La fiscal ha sido muy cercana. La PDI hizo su trabajo. Todos están haciendo su trabajo. El SML también. Eso denota una organización a nivel país en este tipo de casos, donde sí funcionó y se activó absolutamente todo para dar con el paradero de Anahí, viva o muerta, que fue lo que yo dije desde el primer minuto que mi hija no llegó a dormir a la casa”, añadió en conversación con El Mercurio.

Además, concluyó que “nunca me encerré a las posibilidades” respecto a los motivos del deceso de Anahí, y que “hay que aprender a aceptar las situaciones y no temerles como les tememos”.