Mañana martes, el fiscal nacional, Jorge Abbott, y el general director de Carabineros, Bruno Villalobos, sostendrán una reunión conjunta agendada para las 16:30 en dependencias del Ministerio Público.
Una señal de coordinación tras la polémica que enfrenta a ambas instituciones. Según fuentes conocedoras de esta cita, el encuentro fue instado por una alta autoridad de La Moneda, quien hizo de puente entre Abbott y Villalobos. Las gestiones se hicieron desde Interior y se dan luego de que el viernes el titular de la cartera, Mario Fernández pidiera que se hicieran gestos por ambas instituciones. Desde Interior habrían manifestado que se trata de un tema puntual que no debe afectar a las instituciones.
El encuentro, a su vez, fue aceptado por la máxima autoridad del Ministerio Público con la condición de que en la instancia no se aborde ningún aspecto de las investigaciones por obstrucción a la investigación y falsificación de pruebas que llevan adelante los fiscales regionales de La Araucanía Cristián Paredes y de Aysén Carlos Palma. En esta última causa declaró como testigo el viernes pasado el general director de Carabineros y como imputado un día antes el jefe de Inteligencia, general Gonzalo Blu.
Desde Carabineros, en tanto, aseguran, que Villalobos siempre ha estado dispuesto al diálogo. Y desde el Ministerio del Interior se habían solicitado explícitamente gestos entre ambas instituciones desde la semana pasada. Incluso, se pidió que esta cita se concretara el viernes 2 de enero, sin embargo los asesores del fiscal nacional Jorge Abbott impidieron que la reunión fuera ese día, sobre todo porque en la mañana Villalobos había participado de una diligencia por lo que no pareció prudente la situación.
Dentro de los puntos que se tratarán mañana entre Abbott y Villalobos está el pedir por parte del primero colaboración de la policía en las indagatorias y representar su malestar por las palabras del general Blu cuando acusó a la Fiscalía de amparar a violentistas.
La máxima autoridad del ente persecutor pedirá que Villalobos interceda para que no se vuelvan a repetir hechos como esas declaraciones desde el Alto Mando, el impedimento del allanamiento en las unidades investigadas en Temuco y el que se haya sacado a Fuerzas Especiales a la calle cuando los fiscales y la PDI intentó incautar los computadores.
La Fiscalía intentará en la cita aclarar que ellos no han escalado a una pugna entre ambas instituciones y que de hecho eso queda demostrado en el gesto de recibir a Villalobos, el correo que Abbott envió la semana pasada a sus funcionarios diciendo que esto se trata de algo puntual y en el respeto que el Ministerio Público siente por la labor de la policía uniformada en el país y en cuentos de indagatorias abiertas en que se trabaja con ellos.
Lo que sí, junto con destacar la importancia que tiene para la institución el respeto por el Estado de Derecho, se manifestará ante Villalobos lo grave que significa que personal de Dipolcar haya sido controlado afuera de la casa del fiscal Cristian Paredes y los eventuales seguimientos al investigador.
La cita se dará luego de una semana en que Villalobos enfrentó críticas por su decisión de viajar fuera de Chile a tomar vacaciones, en momentos en que Carabineros enfrenta una crisis luego de que la Fiscalía cuestionara las supuestas interceptaciones de comunicaciones a líderes de la CAM, acusando que hubo alteraciones a dichas pruebas.
El episodio ha generado choques entre el Ministerio Público y la policía uniformada, con controversias como un allanamiento a oficinas de Labocar en Temuco hace dos semanas, en que fue necesaria la intervención del ministerio del Interior para que se realizara el procedimiento.
Abbott señaló ayer domingo, en entrevista con Reportajes de La Tercera, que el caso "va a marcar un antes y un después en el sentido de que se va a tomar conciencia concreta de que no es posible adulterar pruebas con el objeto de obtener la condena de alguien".