Hoy, por tercer día consecutivo, en el Séptimo Juzgado de Garantía se está llevando a cabo la formalización de altos mandos de Carabineros en el marco de una investigación por la presunta malversación de gastos reservados al interior de la policía uniformada.
La formalización comenzó el martes, cuando el tribunal decretó las medidas cautelares de firma mensual y arraigo nacional para la exministra de Justicia y exsubsecretaria de Carabineros, Javiera Blanco por el presunto delito de malversación de gastos reservados durante el desempeño de este último cargo. Respecto a Blanco, la fiscalía afirma que se apropió de $ 42.138.000 provenientes a fondos públicos. Asmismo, la causa continuó ayer con la formalización de dos exgenerales directores de Carabineros, Gustavo González Jure (2011-2015) y Bruno Villalobos (2015-2018), por los delitos de malversación de gastos reservados y falsificación de instrumento público.
Ayer la audiencia se extendió por casi siete horas y concluyó con la intervención de la fiscalía y el Consejo de Defensa del Estado. El Ministerio Público pidió la prisión preventiva para González Jure y Villalobos. De acuerdo a la acusación, el primero tuvo a su cargo $2.147.446.473, sustrajo $1.181.060.811 y se apropió de $123.740.000 y US $ 4.000. El segundo habría tenido a su cargo $982.062.319, sustraído $ 606.492.429 y se habría apropiado de $67.461.000.
En tanto, hoy es el turno de la defensa de los uniformados. El primero en tomar la palabra fue Pedro Orthusteguy, abogado de González Jure. En uno de los puntos de su defensa, el legista planteó que González Jure “es una persona absolutamente austera” y que “si estamos ante un director que en su época malversó caudales públicos, debería tener una situación patrimonial un poco mejor”. En esa línea, apuntó a diferenciar a su representado de causas similares, donde la fiscalía indaga al exdirector de la Policía de Investigación, Héctor Espinosa, y el excomandante en Jefe del Ejército Juan Miguel Fuente-Alba.
“Uno pensaría que si se malversaron dineros esto debería estar en alguna casa, como ocurre con el caso de la Policía de Investigaciones, donde se usaron 300 millones para comprar una casa, eso no ocurre con el general González Jure. O se compraron Audis como ocurre en el Ejército, como está siendo investigado el excomandante en jefe del ejército. Aquí no hay compras de vehículos, no hay compras de terrenos, no hay compras de casas, no hay incremento en sus cuentas corrientes de ningún tipo”, afirmó.
“El general González Jure es una persona absolutamente austera. Vive en una casa heredada, tiene una casa en la Cuarta Región, una segunda vivienda, con una cabaña, que se adquirió en los años 90, cuando era teniente más o menos en esa época. Y tiene un auto de 2017, que para no andar en el auto más antiguo que tenía antes lo renovó y tiene este de 2017. Y en sus cuentas corrientes lo único que tiene es un desahucio”.
Por otro lado, afirmó que “el presupuesto anual de Carabineros es de aproximadamente 1.600 millones de dólares. Los gastos reservados equivalen a 600 mil dólares en el contexto del presupuesto, es decir a equivalente a 0,03%. El general director no puede estar encima, es imposible que esté encima, de una ejecución presupuestaria de 1.600 millones de dólares, para eso existe la administración a cargo de la Dirección de Finanzas donde trabajan personas con la formación profesional técnica”.
Se espera que el tribunal resuelva las medidas cautelares para los acusados.
Defensa de Bruno Villalobos
Más tarde, a eso de las 14.30, fue el turno del abogado de defensor de Villalobos, Ángel Valencia. Rechazando la acusación de la fiscalía, Valencia sostuvo que “el general en retiro Bruno Villalobos Krumm ha manifestado ante la fiscalía que no ha sustraído un peso de Carabineros en su beneficio, ni en beneficio de terceras personas, y no existe antecedente alguno que lo permita concluir”.
Por otro lado, el defensor dijo que la conducta de Villalobos “no solo es irreprochable, sino que además tiene destacadísima trayectoria de servicio público y a la patria”.
El legista apuntó a la responsabilidad en el caso del exjefe de Finanzas de Carabineros, Flavio Echeverría, uno de los principales protagonistas del fraude en la institución uniformada. A este lo tildó como “el jefe de la mafia de la Intendencia”. En ese sentido, puso realizó una metáfora: “Acá hubo un incidente en una carnicería y el testigo principal de los persecutores es el gato. El gato a cargo de la carnicería es el principal testigo de los persecutores”.
Continuando este planteamiento, dijo: “Ni el general Villalobos ni tampoco el generales Gustavo González Jure sabían que a cargo de la Dirección de Finanzas estaba el líder de la mafia de la Intendencia. Y ese es el testigo principal de la fiscalía, junto con sus secuaces para insinuar que estos fondos entregados a las altas reparticiones de Carabineros no tenían por finalidad destinarse a la función policial, sino que, en opinión de ellos probablemente, las altas reparticiones de Carabineros eran tan ladrones como ellos. Presumir aquello es en sí mismo una falta de respeto”.
La audiencia culminó pasadas las 16.00 horas y continuará la mañana de este viernes desde las 9.00 horas.