"Cuando veníamos por la cuesta llegando a Paposo, el bus empezó a tambalearse, agarrando una curva, no sé si a 100 o a más de 100 kilómetros por hora (...) Tenía el presentimiento de que se podía volcar", relató este lunes Michael Castro.

Se trata de uno de los sobrevivientes del volcamiento de un bus interurbano en la cuesta Paposo, ubicada en la Ruta B-710, carretera que une a Antofagasta y Taltal. El accidente dejó como resultado -hasta la noche del lunes- a 21 personas fallecidas, de un total de 41 pasajeros que se trasladaban en un servicio de la empresa Turbus, entre la capital regional y Ovalle. El resto de los usuarios resultó lesionado, por lo que fueron trasladados a los hospitales de Taltal y Antofagasta con heridas de diversa consideración.

Se trata del mayor siniestro vial desde el ocurrido en mayo de 2006, cuando fallecieron 26 personas, producto de un bus que cayó al lecho de un río, en San Fernando. Otra tragedia de gran magnitud fue la ocurrida en noviembre de 2010, cuando murieron veinte pasajeros en la Autopista del Sol, también en un móvil de Turbus.

El accidente del lunes sucedió cuando se desbarrancó el vehículo alrededor de 20 metros, en la quebrada de Paposo, cerca de las 22.45 horas, por causas que están siendo investigadas por el Ministerio Público. "Como línea investigativa se maneja el error humano o un error mecánico, cosa que va a ser establecida a través de los peritajes que se dispusieron", aseguró el fiscal de Taltal, Ricardo Castro, quien concurrió al lugar junto a la Sección de Investigaciones de Accidentes de Tránsito de Carabineros (SIAT), entidad que realizó las primeras diligencias.

La alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, quien dialogó con algunos de los sobrevivientes, afirmó que uno de los hechos que explicaría el accidente es "el exceso de velocidad; algunas personas coinciden en que incluso el auxiliar del vehículo interurbano fue a decirles que se pusieran los cinturones. Luego, ocurrió la tragedia".

El alcalde de Taltal, Sergio Orellana, también se refirió al hecho: "Mi visión es que esto corresponde a un problema de conducción, la carretera está en buenas condiciones".

De acuerdo al Ministerio de Transportes, el lugar donde se produjo el accidente corresponde a una curva cerrada, donde se estableció una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora.

Empresa

La empresa Turbus, mediante un comunicado, lamentó el hecho, en cual fallecieron tres de sus trabajadores (uno de ellos era el conductor). La compañía informó que el bus operaba cumpliendo con los permisos de circulación, las revisiones técnicas y que contaba con seguro obligatorio.

La firma detalló que la máquina tenía sus mantenimientos al día. "La tripulación se encontraba con todos los cumplimientos legales en norma, tales como días de jornada, horas de descanso entre jornada y tiempos de conducción. Así como también el alcotest, procedimiento que realiza la empresa en cada salida de sus servicios, el que se encontraba en completo cumplimiento", se añadió en el mismo comunicado.

Según el Ministerio de Transportes, el vehículo que protagonizó el hecho había tenido 13 fiscalizaciones entre 2018 y 2019. En ese periodo se le habían sacado dos multas; una por tener el extintor descargado y otra por el apoyapiés en mal estado.

El bus accidentado tenía dos pisos, por lo que nuevamente algunos usuarios plantearon los supuestos riesgos de este tipo de máquinas. Al respecto, Paula Flores, jefa de fiscalización de la cartera, señaló que "las exigencias de seguridad están dispuestas por normas internacionales, entre ellas la prueba de estabilidad. Estos buses cumplen con la normativa de seguridad".

Recordó que el parque de buses interurbanos está compuesto en un 58% por vehículos con dos plantas.

El intendente de Antofagasta, Edgar Blanco, instruyó a Vialidad del MOP que realice "un análisis de la ruta, de manera de tener nuevos antecedentes para ver si existen medidas para incrementar la seguridad, en un sector complejo".