"Yo creo que hay una sobreideología y se perdió el respeto por la autoridad bien entendida; se validaron las tomas, se sacó al rector, se crearon los consejos resolutivos". Así explicó el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, la crisis de violencia que vive el Instituto Nacional y que culminó con las autoridades municipales creando un manual con diez medidas urgentes para terminar con este tipo de hechos.
En conversación con Mesa Central de T13, el jefe comunal señaló que se trata de un grupo de cerca de 30 alumnos que han tenido el respaldo de "de adultos, apoderados" para crear estas situaciones, pero aseguró que la Municipalidad de Santiago y las autoridades "tienen los pantalones bien puestos" y este tipo de situaciones están siendo investigadas por la PDI y el Ministerio Público.
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Alessandri explicó que para terminar con la violencia que se ha registrado en el establecimiento, se han aplicado las denominadas "Diez medidas urgentes para devolver el Instituto Nacional a sus alumnos", y se ha hecho un llamado a los docentes, centros de padres y de alumnos a conversar y debatir sobre cómo resolver el ambiente de crisis que se vive en el recinto educacional.
Consultado sobre qué pasara con los responsables, el alcalde de Santiago fue categórico en señalar que serán expulsados y destacó la aprobación de la ley Aula Segura.
Finalmente, Alessandri aseguró que "gran parte" de la responsabilidad del escenario actual es de la administración de la exalcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, porque existió una "polítización exacerbada", añadiendo que fue durante ese período en que se generaron la mayoría de los problemas que hay en la comunidad del Instituto Nacional.
