Aproximadamente a las 7.30 de la mañana de este sábado, un guardia de seguridad se encontraba manejando a la altura del kilómetro 9 de la Ruta 68, cuando un extraño bulto sobresalía de una maleta de viaje que se encontraba en la carretera.
Según el relató del fiscal a cargo, Marcelo Duque, al hombre le pareció ver que desde el objeto sobresalían unos pies. Por lo que decidió abrirlo. La sorpresa fue mayor para el sujeto: se encontró un cadáver con una mordaza en la boca.
Tras ver esta escena, el guardia de seguridad decidió llamar a Carabineros para informar del hecho e ingresar la denuncia correspondiente.
Luego de realizar las diligencias, los policías dieron cuenta que el fallecido se trata de un hombre de entre 20 y 30 años, pero que aún no se ha determinado la identidad del occiso, ya que no portaba ningún documento identificatorio.
Lo que sí se pudo determinar es que habría participación de terceros en su muerte. Acorde a las pericias preliminares, su rostro y cuello tenían visibles marcas de haber sido agredido. De hecho, la principal hipótesis que maneja el Ministerio Público es que la causa de muerte fue por asfixia. Además, la víctima no tenía heridas de bala u objetos cortopunzantes.
De igual forma, el fiscal del Equipo del Crimen Organizado y Homicidios, Marcelo Duque, reveló que la víctima había fallecida hace más de siete horas desde que fue encontrado.
Por orden de la fiscalía, serán efectivos de del Laboratorio de Criminalística (Labocar) y el OS9 de Carabineros los encargados de investigar qué hay detrás de este asesinato.