Mañana a las 20.00 horas, el Presidente Gabriel Boric iniciará su primera gira a Europa, acompañado del ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren. Sin embrago, el viaje del Mandatario -que lo mantendrá fuera del país por 10 días-, ha sido cuestionado por la oposición, puesto que se daría en medio del escándalo de presunta corrupción que investiga el Ministerio Público a propósito de los traspasos entre el Ministerio de Vivienda y fundaciones sin fines de lucro, cuyo epicentro es el partido oficialista Revolución Democrática.
La gira contempla cuatro países de Europa, la primera parada será España, luego el Mandatario visitará Francia, Bélgica y Suiza. El viaje, en tanto, estará enfocado en fortalecer vínculos y movilizar una agenda económica.
Esta mañana, el canciller, en conversación con radio Cooperativa, abordó el viaje del Mandatario y las críticas que han surgido en torno a ello, asegurando que “el Presidente no se va de vacaciones a Europa”.
Sus palabras, van en línea con lo que ya había mencionado el pasado viernes en un punto de prensa tras el comité político, donde, junto a la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, respaldaron la gira presidencial.
“El Presidente no se va de vacaciones a Europa. Yo invito a cualquiera a consultar la agenda de trabajo que tiene el Presidente y sus colaboradores en esta gira, le puedo asegurar que es muy intensa y además, incluye una serie de contactos que son muy importantes, tanto desde el punto de vista económico como desde el punto de vista político”, señaló esta jornada el canciller.
En esa línea, explicó que las críticas “no son nada nuevo” y que forman parte de la “rutina política”.
“Siempre existen críticas cuando se organizan giras, eso no es nada nuevo en Chile y en otros países también, y se reprocha a los Presidentes porque realizan viajes, eso, yo diría, que es parte de la rutina política. Eso sí, como cancillería lo que pediríamos es que se deje a la política exterior fuera del debate político”, indicó el ministro.
Asimismo, insistió en que esta “es una gira que está muy bien armada” y que las visitas presidenciales “están programadas con mucha anticipación, responden a necesidades que son absolutamente objetivas”.