"Alessandri, escucha, seguimos en la lucha". Repitiendo este grito llegaron hace unos momentos cerca de un centenar de estudiantes y apoderados del Instituto Nacional a la Municipalidad de Santiago, en Plaza de Armas.
Detrás de un lienzo que decía "por el derecho de estudiar en paz", los manifestantes partieron a las 13.20 desde el frontis del establecimiento, en calle Arturo Prat, y avanzaron por el Paseo Ahumada hasta el municipio. En el camino recibieron el respaldo de otras movilizaciones que a esa hora se desarrollaban en el centro, entre ellas, la de los funcionarios de la salud.
La manifestación fue convocada por el centro de estudiantes, cuyo presidente, Rodrigo Pérez, señaló que la decisión de cerrar el año anticipadamente no fue socializada con la comunidad educativa.
"Quienes tenemos la legitimidad representativa de los distintos estamentos no fuimos comunicados, no se nos preguntó y ni siquiera se nos avisó. Esta medida es deshacerse de un problema y su asidero tiene que ver con los hechos de violencia, pero cómo se resuelven estos hechos. Entregando condiciones dignas, financiando el déficit en infraestructura, entregando una malla de reemplazo de profesores. Es importante atender ese tipo de preocupaciones", señaló Pérez.
Durante la mañana, en el liceo hubo reuniones de profesores y funcionarios. Al finalizar y a medida que los académicos se retiraban del lugar, les decían a los estudiantes que se les acercaban, cómo podrían recibir los contenidos y de qué forma se les iba a evaluar.
Al frontis del colegio también llegaron padres quienes también se enteraron de la decisión la tarde de ayer. Según ellos, hay varias preguntas que seguían sin resolverse: qué pasará con las calificaciones que faltan; con los contenidos que no se pasaron, y cuál es la situación de los posibles alumnos repitentes, tanto por notas como asistencia.