Todas las cifras sobre coronavirus respecto de la Región de Aysén sorprenden: tiene solamente siete casos confirmados, a casi dos meses desde que se inició la pandemia; no contabiliza fallecidos; y todos los positivos ya son calificados como “recuperados”, pues se infectaron en marzo. Es decir, pasó su periodo de aislamiento y de eventual contagio. Además, tampoco hay personas hospitalizadas.
Esta región, donde habitan 103.158 habitantes, estuvo en la mira en marzo. En un principio fue uno de los "puntos rojos " de la crisis sanitaria. Allí, en Caleta Tortel, se declaró la primera cuarentena a nivel nacional, cuando un turista inglés, de un crucero, dio positivo, después de haberse paseado por todo el pueblo.
La comuna, sin embargo, ya levantó el aislamiento. Y la seremi de Salud local, según se informó, ha seguido la ruta de los contagiados con éxito.
Primero, el turista enfermo habría infectado a un paramédico en Tortel. Luego, otros cinco trabajadores del sector acuícola, provenientes de fuera de la región, también resultaron infectados. Y todos ellos ya hicieron un periodo de aislamiento y fueron dados de alta.
Gente estricta
¿Qué factores pesan en que no aumenten los contagios? El alcalde de Coyhaique, Alejandro Huala, lo atribuye a que las inmediatas manifestaciones de los habitantes de Aysén, en marzo, llevaron a que se implementaran barreras sanitarias muy estrictas desde el inicio, las que continúan y actualmente ascienden a 16 en toda la región.
“La gente se movilizó, se tomaron los caminos hacia Balmaceda, en Puerto Aysén y en varios otros lugares, como una señal de no querer dejar entrar a nadie y exigiendo que hubiera más fiscalización”, dice el jefe comunal.
Agrega que también las autoridades hablaron con la industria salmonera para que no funcionara con plena normalidad, por lo que ahora los trabajadores acuícolas se dirigen directamente por vía marítima hacia sus centros de cultivo, sin pasar por Aysén.
“No queremos correr riesgos, porque nuestra infraestructura de salud es vulnerable”, dice Huala.
Así, desde el 5 de abril pasado, no tienen casos nuevos.
Cuarentenas preventivas
La intendenta de la Región de Aysén, Geoconda Navarrete, sostiene que además de las barreras sanitarias, se cerraron los pasos fronterizos por tierra.
En forma paralela, se adoptaron cuarentenas preventivas para las personas que provenían desde fuera de la región.
Además, la autoridad añade que aún teniendo pocos casos, el comercio se mantiene sin funcionar, excepto algunas grandes multitiendas.
También se ordenó que los buses operen con un 50% de su capacidad, para evitar aglomeraciones.
El presidente del Colegio Médico de Aysén, Claudio Vallejos, plantea que “el hospital cuenta con sus unidades de cuidados intensivos desocupadas en la actualidad. Sin embargo, están todos muy atentos y coordinados, para que no haya nuevos contagios, tomando la medida de aduanas sanitarias y que no vengan trabajadores desde fueracon el virus”.
Test operativos
¿Se están realizando todos los test que se requieren? La intendenta Navarrete plantea que los análisis de las muestras son realizadas en los hospitales de Coyhaique y de Aysén y en el Cesfam de La Junta. Y en una cantidada adecuada a los requerimientos. Dice que no les han faltado.
También añade que la región tiene como capacidad un total de 24 camas críticas para atender a casos más graves, los que hasta ahora no se han presentado.
Con todo, el alcalde de Puerto Aysén, Luis Martínez, señala que aunque el Ministerio de Salud planteó que en esa zona se podría retornar a clases en un futuro próximo, “no reanudaremos las actividades en las escuelas al menos hasta mayo, porque nuestra red de salud es muy frágil y no queremos coparla”.