A un año de su implementación, el gobierno entregó un balance del Plan Calles Protegidas, medida que aumentó las fiscalizaciones a vehículos de tránsito a lo largo del país.
El ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz; la ministra del Interior, Carolina Tohá; la jefa de Zona Tránsito, Carreteras y Seguridad Vial de Carabineros, general Marcela González; y el jefe nacional de Fiscalización del MTT, Óscar Carrasco, llegaron hasta el Aparcadero Custodia Metropolitana, ubicado en Quilicura, para informar que hasta la fecha se han realizado más de 720 mil controles en todo el país y más de 2 mil operativos de Carabineros y funcionarios municipales.
Muñoz señaló que el plan busca elevar las fiscalizaciones de distintos tipos de vehículos, “garantizando que estén en condiciones adecuadas para poder circular”. De los 720 mil controles, dijo el ministro, en 170 mil casos se cursaron infracciones. Asimismo, en 10 mil casos se procedió a quitarle el auto a sus conductores por diversas infracciones, como la falta de documentos o manejar bajo influencia de alcohol o drogas.
El secretario de Estado dijo que durante el último año se aumentó en un 20% el número de controles de tránsito. Respecto a las motocicletas, se realizaron 60 mil inspecciones. Muñoz destacó que a comienzos de año 4 de cada 10 motos presentaba algún tipo de anomalía. Sin embargo, durante las últimas semanas, 2 de cada 10 de estos medios presentan algún tipo de falta. “Lo que queremos es un cambio de actitud”, afirmó.
“Para los objetivos de priorizar la seguridad de las personas este tipo de esfuerzo tiene un impacto gigantesco”, comenzó diciendo por su parte la ministra Tohá, quien destacó el plan y dijo que estaba relacionado con otra medida del Ejecutivo: Calles Sin Violencia.
“Los vehículos que circulan en nuestras calles, sean automóviles, sean buses, camiones, motocicletas, son factores de transporte, pero son factores de riesgo también. Cuando no están con sus condiciones técnicas al día, cuando se conducen por personas que no tienen documentación, cuando se conducen de manera irresponsable o bajo el efecto de alcohol o drogas, ciertamente tienen una capacidad de causar daños, de causar siniestros, de lesionar personas, de hacer que pierdan la vida personas, que es una prioridad de seguridad”, explicó.
La ministra del Interior señaló que antes de que se implementará el plan se hacían cerca de 200 controles, vale decir el 10% de los que se hacen ahora.
“Este mayor control en el transporte tiene un potencial de identificar factores de riesgo y de generar seguridad muy importante”, aseguró.
“Seguiremos apoyando este plan del Ministerio de Transportes, trabajando en conjunto, porque estamos convencidos que estando en las calles presentes, inhibe la inconducta no solamente de la Ley de Tránsito, sino que también disminuye el delito”, dijo por su parte la general González.