Hace siete días, una patrulla de Carabineros en Recoleta fue atacada por cerca de 50 personas en la esquina de Purísima con Antonia López de Bello. Así, Luis Alejandro Abricot Salazar, uno de los uniformados que iba en la patrulla presentó hoy ante el Tercer Juzgado de Garantía de Santiago una querella "en contra de todos los civiles que resulten responsables por el delito de homicidio simple". El funcionario dijo que "los hechos relatados son gravísimos ya que estos manifestantes se propusieron quitarnos la vida, deliberadamente la que pudimos preservar gracias al uso disuasivo de nuestras armas de cargo fiscal".
En el documento explica que el 19 de noviembre cerca de las 20.00 "me encontraba como sargento primero al mando de una patrullera que me transportaba en una misión junto con mis subalternos en el barrio Recoleta, en la ejecución de un procedimiento policial preventivo en la comuna".
Detalló que el vehículo era conducido por el cabo primero Stefano Salas, en la parte posterior estaba el carabinero Eduardo Brito y como jefe de patrulla y copiloto iba él. "Al llegar a la intersección de las calles Antonia López de Bello con Purísima, fuimos brutalmente atacados por una turba de aproximadamente cincuenta manifestantes, quienes de manera violenta, desmedida e infundada comenzaron a atacar la patrulla de Carabineros. El ataque fue realizado por sujetos cuya identidad hasta ahora se desconoce, quienes nos arrojaron diversos objetos contundentes, como piedras, azulejos bolsas de cementos, palos, entre otros", dice la querella.
Debido al tráfico vehicular que existía en ambas calles, señala que no pudieron moverse, situación que "aprovecharon los manifestantes para continuar con las agresiones". Las imágenes de lo ocurrido fueron difundidas por los medios de comunicación y redes sociales.
Asegura en el texto que "a raíz de estos ataques violentos, después de momentos de mucha tensión junto al cabo primero Stefano Salas, abrimos la puerta del automóvil y para proteger nuestras vidas percutamos al aire aproximadamente cuatro disparos, al mismo tiempo el funcionario Stefano Salas, sale de la patrulla policial y efectúa aproximadamente tres disparos al aire, lo que permitió que pudiésemos salir del lugar. Este funcionario fue alcanzado por un elemento contundente que fracturo su nariz".
A raíz de los disparos de Carabineros, dos personas fueron heridas. Una de ellas es María Gracia Cuadrado, estudiante de Danza de la Universidad de Chile. La joven fue trasladada al Hospital San José, donde fue atendida y posteriormente dada de alta.
El caso deberá ser investigado por la Fiscalía Centro Norte.
Los abogado que representan al carabinero denunciante son abogados Jorge Martínez Cornejo, Mario Vargas Cociña, Camila Motta González y Maria Catalina Tuane Naza. El grupo de penalistas está a cargo de una serie de causas en que funcionarios de la policía uniformada está vinculada por hechos de este tipo.