En un 23% han bajado los robos con violencia a nivel nacional y en un 14% disminuyeron los ilícitos de mayor connotación social durante el último mes. Las cifras son valoradas por el gobierno y las policías, sin embargo, también hay preocupación por un nuevo factor, asociado al cambio de conducta de las bandas criminales.
Según un análisis del OS-9 de Carabineros, “el escenario delictual nacional ha vivido ciertas transformaciones con la pandemia sanitaria que nos aqueja, delitos que antes se mantenían bajo cierta invisibilidad y ahora se han visualizado”. En ese sentido, se pone como ejemplo el auge de las estafas por internet y también las incivilidades como las fiestas clandestinas.
Además, el análisis del Departamento Investigativo de Carabineros también contempló otro factor: el cambio de horario en el que operan los delincuentes.
La policía uniformada analizó los delitos registrados por tramos horarios, entre enero y abril. En total, se contabilizaron 158.037 ilícitos de mayor connotación social.
Entre enero y febrero hubo 88.998 delitos, donde un 22,4% ocurrió en el tramo de las 20.00 a las 23.59.
Durante marzo y abril la policía detectó un cambio. En estos meses se registraron 69.039 ilícitos a nivel nacional y entre las 20.00 y las 23.59 ocurrió el 20,6% de los delitos. Es decir, Carabineros registró una baja de casi dos puntos porcentuales, en comparación con los meses anteriores.
Según el análisis que hace el OS-9, esto se puede atribuir al efecto del toque de queda, a raíz del coronavirus, el que prohíbe el tránsito, sin salvoconducto, entre las 22.00 y las 5.00.
El jefe del OS-9, coronel Juan Francisco González, explicó que “la restricción de circulación de las personas con el toque de queda y la mayor presencia policial y militar han generado una movilidad horario en los delitos. Por ahora, ha habido una concentración mayor en el horario diurno, donde están apuntando más a la salida de las personas desde los bancos”.
Tomando en cuenta que los bancos cierran a las 14.00, y analizando la mutación horaria levantada por Carabineros, esto coincide con la apreciación del coronel González.
Entre enero y febrero, entre las 8 de la mañana y las 15.59 se concentraba el 38% de los ilícitos. Ahora, en marzo y abril, en este tramo horario se agrupa el 42% de los delitos.
Otra variación ocurrió en el tramo de la madrugada. Carabineros da cuenta de que en enero y febrero, entre las 00.00 y las 3.59 se cometía el 11,5% de los delitos de mayor connotación social. Ahora, entre marzo y abril, el 9,2% de estos ilícitos.
La subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, indicó que “las restricciones a la libertad de circulación (cuarentena, toque de queda), junto al despliegue de las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad, ha influido en la baja importante de los delitos de mayor connotación social. Esto, ya que al existir una mayor presencia policial y menos personas aglomeradas y circulando, disminuye la oportunidad delictual”.
Agregó que “la delincuencia, dadas las condiciones actuales ha mutado. Por ejemplo, algunas bandas que se dedicaban al robo por sorpresa hoy están cometiendo robos con violencia o intimidación. Es por esto que hemos realizado un plan que contempla la prevención del delito mediante presencial policial”.
Por su parte, la académica de la Universidad de Santiago, Lucía Dammert, dijo que “los delitos mutan de horario, no disminuyen. Acá el promedio nos está ayudando poco, porque habría que ver en detalle los cuadrantes, pero evidentemente en Chile, donde un porcentaje amplio de los delitos ocurre en el espacio público o en los centros comerciales, no sorprende que los delitos hayan bajado, pero el tema es cuánto van a subir cuando se reabran los espacios de tránsito en las calles”.
Comisión bicameral
Los avance en materia de seguridad pública, en tanto, podrían tener un salto en el Congreso. Parlamentarios de Chile Vamos y de oposición mantienen por estos días conversaciones con el gobierno para impulsar una comisión bicameral.
En esas gestiones están hoy el diputado RN Gonzalo Fuenzalida y el senador PPD Felipe Harboe.
Fuenzalida señaló que “para poder avanzar en orden público, necesitamos una base y eso es un acuerdo político entre todas las fuerzas, para ponernos de acuerdo en qué tipo de seguridad pública queremos, entre diputados y senadores. Esto se hizo con la Reforma Procesal Penal y dio resultado”.
Harboe, por su parte, señaló que “es un camino viable y es la única forma de viabilizar una reforma de Estado de tal envergadura”.
