En el Cementerio El Prado ubicado en Puente Alto tuvo lugar este jueves el funeral de Edson Olivares, barrista de Universidad de Chile -apodado como “Enzo Bombazul”- quien falleció el sábado 26 de octubre tras ser acribillado por desconocidos.
El funeral fue catalogado como de alto riesgo por las autoridades. Por ende, tanto en el velorio como en el traslado al cementerio, se efectuó un amplio despliegue policial.
El coronel Robinson Villarroel informó que “Carabineros ha dispuesto los servicios preventivos correspondientes. Hay que tener presente que las fechas se han puesto por los familiares directamente con el cementerio y Carabineros se ha preocupado de disponer de estos servicios con la única finalidad de que las familias que concurran el día de hoy lo hagan de manera tranquila”.
“Muchos de ellos (los asistentes) obviamente tenían algún antecedente policial, no presentaban carnet de identidad, se mantuvieron en las inmediaciones y aprovecharon esa oportunidad para tratar de ingresar. Ante esa situación Carabineros aplicó de manera inmediata el protocolo y evitó que ingresaran estas personas infractoras de ley, más que seguro porque no tenían carnet de identidad y se daban a la fuga cada vez que veían a Carabineros”, añadió.
Asimismo, el oficial informó que algunos asistentes intentaron ingresar con bombos y otros elementos que ya fueron decomisados. A su vez, también descartó que se registraran personas heridas.
De momento, Carabineros aún está verificando la cantidad de detenidos. Sin embargo, la institución policial confirmó que una persona que intentaba ingresar un bombo al cementerio fue detenida.
Adicionalmente, los efectivos policiales tuvieron que coordinar el ingreso de personas que debían asistir a otros funerales al interior del recinto.
“Desafortunadamente había horarios para más funerales. No obstante, rápidamente se realizaron los cursos de acción para que todas las personas que vienen a ver a sus difuntos, vengan al cementerio”, detalló el coronel.