“Estamos muy contentos, porque llevamos más de dos años de tramitación, pero casi 10 desde que como gobierno, en el primer mandato del Presidente Piñera, presentamos el primer proyecto que ponía fin al Sename”, asegura la subsecretaria de la Niñez, Carol Bown.
¿Y cómo toman este logro de avanzar en ponerle fin al Sename, tal como lo conocemos actualmente?
Nos damos cuenta hoy día que con esto estamos en un nuevo comienzo, que nos lleva a rescatar lo más valioso que tenemos como sociedad, que son los niños, los niños vulnerados, los que han sufrido. Entonces estamos dando los primeros pasos para concretar una institucionalidad que es parte de un proceso de corto, mediano y largo plazo, que se suma a lo avanzado en gobiernos anteriores, como la creación de la Defensoría de la Niñez y la Subsecretaría de la Niñez. Y se completará finalmente con la Ley de Protección Integral que seguimos tramitando y que establece un sistema de prevención para evitar que los niños sean vulnerados, y así llegar antes a evitar el sufrimiento.
¿Ha sido muy difícil dar este paso?
Ha costado que esto avance, sobre todo después de las terribles vulneraciones de derechos de las cuales hemos sido testigos. Nos habría encantado que esto avanzara más rápido, pero como país podemos estar orgullosos en el sentido de que hemos ido avanzando en mejorar la institucionalidad para proteger mejor a los niños. En menos de tres años ya tenemos tres institucionalidades nuevas para los niños y que se preocupan de ellos. Por lo tanto, debemos estar orgullosos como país de lo que estamos haciendo, pero no nos olvidamos del pasado y de que estos son cambios paulatinos. Esto no cambia todo lo que ha pasado en el último tiempo. Desde el momento en que se promulgue la ley que crea el nuevo servicio, no es que de un día para otro todos los niños van a estar mucho mejor, sino que son procesos. Hoy empezamos la parte más importante.
¿Cuál es, a su juicio, el cambio más relevante que trae este nuevo servicio de protección?
El cambio más importante es el cambio de concepción. Al dejar de depender del Ministerio de Justicia y pasar a depender del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, entiendo a los niños, niñas y adolescentes como una población vulnerable y pongo el foco en el trabajo del niño con su familia.
Según los planes del gobierno, ¿cuándo estará implementado este nuevo servicio?
Estamos trabajando para tenerlo listo lo antes posible, ojalá durante el primer semestre del próximo año.
¿Cuándo podríamos estar en condiciones de decir que se acabó el Sename?
Eso depende de cómo continúe la tramitación del Servicio de Reinserción Social Juvenil en el Congreso. Cuando eso esté listo, ahí se va a poder cerrar el Sename. Pero en materia de protección, el Sename empieza a terminar una vez que se promulgue esta ley.
Este nuevo servicio no ha estado al margen de las críticas. ¿Cómo toma esos comentarios?
Este nuevo servicio no es solamente un cambio de nombre. Estamos orgullosos de lo que hemos construido transversalmente. Todo lo que se puso en este proyecto de ley fueron las medidas establecidas y acordadas en el Acuerdo Nacional por la Infancia. Se trabajó con múltiples actores de la sociedad civil, se escuchó y se enriqueció infinitamente este proyecto durante toda la tramitación. Por lo tanto, no queda más que el orgullo de haber construido un proyecto aprobado de forma transversal. Ahora, el desafío más importante es ponerlo en vigencia y que sea efectivamente un cambio radical para los niños y no solamente una ley con buenas intenciones.