La Carrera Docente fue una de las reformas más relevantes y polémicas del gobierno anterior: implica un gasto de US$ 2.300 millones anuales y en un inicio enfrentó una gran oposición, incluso de los profesores, quienes levantaron una de las movilizaciones más grandes del último tiempo.
Pero a poco más de un año de estar en régimen, la ley ya comienza a mostrar cambios positivos en la realidad inmediata de los maestros. Así lo muestra una encuesta que Elige Educar aplicó a más de mil docentes, la que refleja que el 82% de la dotación de colegios municipales vio aumentar sus sueldos, en su mayoría entre $ 101.000 y $ 200.000, gracias al incremento salarial que venía ligado al encasillamiento de los maestros a la nueva carrera (ver infografía).
La encuesta también comprobó que la mayoría de los profesores está de acuerdo con algunas de las medidas que trae la ley, como la formación continua gratuita (85%); la obligación de que las carreras de Pedagogía se acrediten (80%); la existencia de programas de ayuda para los profesores nuevos (76%) y el aumento en los requisitos para estudiar docencia (75%).
Además, el sondeo reveló que el 69% de los profesores está de acuerdo con que exista una evaluación docente y una cantidad similar aprueba que este instrumento sirva para encasillarlos en los tramos de la carrera. Pero solo el 39% cree que esa herramienta le es útil para mejorar la labor pedagógica en las salas de clases.
Joaquín Walker, director ejecutivo de Elige Educar, dice que "es impactante el cambio que perciben los profesores en tan poco tiempo, sobre todo porque en tres de cada cuatro docentes el sueldo aumentó más de $ 100 mil. Son percepciones importantes que además se condicen con lo que se dijo que la ley iba a hacer".
A partir de julio de 2019, el aumento de sueldos también será extensivo a docentes de colegios particulares subvencionados, y según Walker eso "debiera hacer más atractivo el ejercicio docente para ese sector y el municipal, por las remuneraciones y la posibilidad de asociar eso al desempeño".
El mito de la evaluación
Walker también destaca la importancia que le dan los profesionales a la evaluación docente. "Esto rompe con el mito que dice que los profesores no quieren evaluarse, porque además, siete de cada 10 profesores creen que el paso de tramos debe estar definido por la evaluación", dice. Sin embargo, advierte que existe el desafío "de que la evaluación docente sea formativa y permita la mejora de los maestros".
El Centro UC Políticas Públicas colaboró en la encuesta, y su director, Ignacio Irarrázaval, concuerda en que "es preocupante que los docentes no reconozcan la evaluación que se les hace como un instrumento para mejorar su labor, porque uno de los objetivos de una evaluación es mejorar los procesos. Ese es un ámbito a trabajar en la implementación de la carrera".
La encuesta también muestra que el 57% de los consultados sabe bien de qué se trata la Carrera Docente, pero solo el 38% cree que existe información oficial clara sobre sus implicancias.
Según Irarrázaval, es probable "que los profesores conozcan la carrera en su globalidad, pero no en el detalle, similar a como la gente no conoce completamente la Ley del Tránsito, pero sabe que no puede cruzar una calle con luz roja". De todas formas, agrega, "hay que mejorar este aspecto, porque es importante que los profesores sepan cómo van escalando en su profesión" y conozcan otros beneficios, como el de las mentorías.
Actualmente, la Carrera Docente es aplicable a los profesores de 5.196 colegios municipales del país, y este año comenzó el ingreso paulatino, hasta 2023, de los educadores de 5.936 establecimientos particulares subvencionados y de administración delegada.
Con ello, se espera que ese año sean beneficiados más de 212 mil docentes del país, el 90% de la dotación nacional.
