A las 18.14 horas del miércoles 14 de noviembre, en el Centro de Salud Familiar de Ercilla se constató la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca Marín. Horas antes, conduciendo un tractor junto al menor M.A.P.C en Temucuicui, Catrillanca había recibido un proyectil en la nuca proveniente del arma de Carlos Alarcón,  sargento del Gope, quien participaba de un operativo posterior a un robo de vehículos de profesoras en el sector.

Se dijo inicialmente que se había cruzado en una inexistente línea de fuego. Lo que figura en la investigación, y en el video entregado por el suboficial Patricio Sepúlveda –que reveló Chilevisión y La Tercera PM- es que desde uno de los helicópteros involucrados en la intervención se mencionó que los sospechosos del robo se encontrarían en un tractor, que Alarcón dio una señal de alto, tras lo cual procedió a disparar al igual que el sargento Raúl Ávila. Sobre el fallecimiento de Catrillanca se entregaron diversas versiones falsas y mientras éstas aún no era desmentidas ante la opinión pública se realizó en un predio de Temucuicui su funeral el 17 de noviembre. Se congregaron más de 3 mil personas. Al siguiente día, el Gobierno informó que habían existido una serie de mentiras, provenientes de Carabineros, sobre lo que había ocurrido.

Hoy, sin embargo, su cuerpo podría ser exhumado luego de que el representante legal de tres de los involucrados en el crimen –Ávila, Sepúlveda y el cabo Braulio Valenzuela- solicitara, en las horas previas a la nueva formalización en la causa, que se realizaran nuevas pericias al cuerpo del joven: "Tal como lo señalamos oportunamente, si era estrictamente necesario y recomendado por un perito tanatólogo, pediríamos la exhumación del cuerpo y frente a la consulta que usted me hace hemos pedido una serie de diligencias y entre ellas la exhumación del cuerpo del señor Catrillanca, a fin de efectuar una segunda autopsia complementaria con nuestro perito privado como adjunto", explicó Javier Jara. Hace unas semanas, frente a la posibilidad de que tal medida fuera requerida, Marcelo Catrillanca, padre de la víctima, había mostrado su molestia y declarado que ello constituiría una falta de respeto.

La solicitud de la defensa de los Gope, se sustenta en un informe solicitado el médico forense Luis Ravanal Zepeda denominado Observaciones Preliminares al Informe de Autopsia que ya fue entregado a la Fiscalía y al que tuvo acceso La Tercera PM, en que sostiene respecto de las conclusiones del informe de autopsia contenido en la carpeta de investigación que "dadas las características del tipo de proyectil utilizado (al cual me refiero en el informe pericial), que correspondería una proyectil encamisado calibre 5,56 de alta velocidad, este puede fragmentarse previo al ingreso en cráneo al contacto con el cuero cabelludo cuando ha sufrido una deformación previa con cambio de trayecto (rebote), tras un impacto con algún elemento que se interpone deformando al proyectil, que ingresa a cráneo siguiendo un patrón de desplazamiento errático, lo que explicaría la fragmentación parcial al contacto con el cuero cabelludo y superficie externa del cráneo".

En esta línea, agrega que "en base a las consideraciones precedentes, no es posible excluir dentro del análisis diferencial, que el disparo que causa las lesiones mortales craneoencefálicas pueda corresponder al denominado impacto por rebote" y advierte que "en el informe de autopsia se señala que el proyectil habría seguido un trayecto lineal a su paso a través de las estructuras encefálicas, generando un efecto explosivo que determina fracturas múltiples en los huesos del cráneo a predomino izquierdo, sin embargo, esta apreciación es contradictoria y no se valida a la luz de los registros fotográficos y descripciones autopsicas".

En el documento Ravanal plantea que la bala "puede fragmentarse previo al ingreso en cráneo al contacto con el cuero cabelludo cuando ha sufrido una deformación previa con cambio de trayecto (rebote), tras un impacto con algún elemento que se interpone deformando al proyectil, que ingresa a cráneo siguiendo un patrón de desplazamiento errático, lo que explicaría la fragmentación parcial al contacto con el cuero cabelludo y superficie externa del cráneo".

"En base a las consideraciones precedentes, no es posible excluir dentro del análisis diferencial, que el disparo que causa las lesiones mortales craneoencefálicas pueda corresponder al denominado impacto por rebote", sostiene.

Junto con plantear una serie de críticas a cómo se desarrolló el proceso de autopsia, Ravanal detalla que "es altamente recomendable la realización de una segunda autopsia, considerando las omisiones descriptivas respecto a la secuencia de distribución de las fracturas de cráneo, necesarias para establecer objetivamente su sucesión secuencial en el estudio de diagnóstico diferencial que permita dilucidar con mayor precisión técnica, si se trata de un disparo directo o un disparo por rebote, tomando en cuenta las observaciones preliminares, lo que permitiría a su vez reconstruir el cráneo, aportando con ello un análisis exhaustivo y preciso respecto del patrón de destrucción de los tejidos, más allá de simple deducción lógica, de que se trata de un disparo con efecto explosivo típico de un proyectil de alta velocidad, lo que no es materia de controversia". Finaliza con que "una reconstrucción anatómica precisa del trayecto basado en el estudio balístico

terminal permitiría a su vez, establecer correlaciones con los elementos y hallazgos del sitio del suceso, dentro del análisis de la dinámica y biomecánica que determina las lesiones mortales".

Los planteamientos de Ravanal contradicen el último informe de la PDI que, como publica La Tercera, despachó un "informe de avance" sobre la trayectoria de la fatal en que estableció, tras realizar una prueba de trayectoria de vuelo que el proyectil no experimentó un cambió de dirección, aunque sí rozó en una goma adosada al tractor.

Hoy, en tanto, se llevará a cabo la formalización en que se presentarán cargos por obstrucción a la investigación contra el exjefe del Gope, Manuel Valdivieso, el exjefe de Fuerzas Especiales Jorge Contreras, contra el cabo Gonzalo Pérez y el exabogado de Carabineros Jorge Inostroza. También se definirá en la audiencia la medida cautelar que la fiscalía pedirá para los imputados.