En un documento de 120 páginas, al que tuvo acceso íntegro La Tercera, la Municipalidad de Lo Prado concluyó su investigación sobre lo que ocurrió con la joven haitiana Joane Florvil, el 30 de agosto de 2017, cuando se acercó a la Oficina de Protección de Derechos (OPD) de la comuna.

El sumario administrativo, que no determinó responsables en los hechos, cuenta con una serie de declaraciones de funcionarios que tuvieron participación directa el día en que, supuestamente, la madre habría abandonado a su hija de un mes y 21 días en las dependencias del municipio, además de detallar cronológicamente los hechos que reconstruyen día por día y hora tras hora lo ocurrido.

El informe, que ya está en manos de la Fiscalía Centro Norte en carpeta reservada, agrega, además, los numerosos recortes de prensa con las coberturas que se hicieron del caso, y las disímiles versiones que se entregaron a la opinión pública respecto de lo que realmente ocurrió ese día.

"En cuanto a las publicaciones de prensa que constan a fojas 39 y siguientes, se puede establecer que estas resultan contradictorias entre sí y poco rigurosas en cuanto a los detalles de los hechos que se investigan", se señala en el sumario.

30 de agosto de 2017

El documento determina, de acuerdo a las cinco declaraciones que se recogen, que en el caso que se catalogó como de "Connotación Pública", el guardia de seguridad alcanzó a cruzar solo algunas palabras con la fallecida joven, minutos antes de que supuestamente dejara el coche con su hija en las dependencias de la OPD.

"Miro hacia afuera, había una mujer parada, me acerqué donde ella y le pregunté qué quería. Ella me respondió 'ayuda marido'. Luego me percaté que ella tenía un coche, me acerqué al lado de ella para graficarle gestualmente hacia dónde tenía que ir para acceder a las dependencias de la Dideco", declaró el guardia. "En ese momento, de forma intempestiva empujó el coche hacia la rampa, adentro de las dependencias. Yo en ese momento solo atiné a sujetar el coche y estabilizarlo. Una vez estabilizado me percaté que la mujer había salido corriendo del lugar, hacia el norte, por calle San Germán".

Según la versión entregada al fiscal designado por el municipio para la indagatoria, el encargado de seguridad, considerando que Florvil se habría retirado intempestivamente del lugar sin entregar una explicación aparente, tomó el coche y lo llevó al interior de una oficina, donde funcionarios de la OPD revisaron a la menor para constatar su estado de salud.

"El día 30, aprox. 16.55, mientras me encontraba en la oficina de la OPD, el guardia entró con un lactante en coche, revisamos a la bebé de forma superficial para identificarla, no encontraba nada (sic) y nos percatamos de una pequeña crisis (ojos blancos, pálida, baja temperatura). Llamamos a Carabineros, quienes no contestaron de inmediato".

El testigo agrega que el problema, tal como se conoció en su minuto, se debía a que el día anterior (29 de agosto) una pareja de haitianos -donde estaba el marido de Joane- habían sido engañada y les habían robado su documentación, pasaportes y dinero. Joane concurrió al otro día a pedir ayuda y fue en ese momento cuando dejó el coche con su hija.

Otra de las declaraciones relata que a eso de las 17.20, buscaron documentación en el coche, pero no encontraron nada. Posteriormente lograron comunicarse con Carabineros, quienes llamaron al juez de turno del Juzgado de Familia de Pudahuel , Ricardo Moraga.

Sin traductor

Debido al tiempo en que la lactante estuvo en el lugar, los uniformados deciden trasladarla, constatar lesiones y posteriormente llevarla a la Casa Nacional del Niño, donde se "detecta que la niña presenta reiteradas crisis de apnea del sueño".

Tras dejar a la menor en la Casa Nacional del Sename, los funcionarios vuelven a la 44° Comisaría de Lo Prado para retirar el coche de la niña y llevarlo al día siguiente al Sename. Al llegar, en el documento se señala que "en esos momentos se aprecia a la madre esposada en la sala de espera de la comisaría. Se les pregunta a los funcionarios de Carabineros de la SIP (...) que se encontraban vestidos de civil cuál era la motivación de la madre para dejar a la niña y ellos responden que la madre hablaba poco español y se negó a entregar declaraciones".

Nuevamente se les preguntó a Carabineros si "utilizaron traductor para detener a la madre, considerando que no hablaba español. Ellos no responden y se trasladan a su unidad".

Polémica en la comisaría

Aunque en el documento solo se menciona el momento en que la joven fallecida fue detenida y llevada a la 48ª Comisaría, en el registro que tiene la policía uniformada, que cuenta con seis cámaras, se ve a Joane ingresar al recinto policial, realizar los trámites de identificación para luego ser dejada en una sala de aislamiento, donde todo el tiempo es vigilada por un carabinero.

El video muestra cómo un funcionario policial trata de calmarla cuando la joven pierde el control y evita que se golpee en la cabeza con un casco, que deciden ponerle para evitar lesiones.

El sumario del municipio de Lo Prado concluye con lo siguiente: "En virtud de lo expuesto, se puede constatar que no ha existido actuación reprochable alguna de los funcionarios intervinientes, quienes siguieron en todo momento protocolos y conductas razonables ante la situación a la que se enfrentaron. Además, la detención de la fallecida y las decisiones tomadas en torno a la menor fueron ordenadas y ejecutadas por los organismos competentes, sin intervención de funcionarios municipales".

Tras morir el 30 de septiembre por un paro cardiorrespiratorio producto de una falla hepática fulminante, en el Hospital Clínico de la Universidad Católica, el cuerpo de Joane Florvil lleva más de 200 días en el Servicio Médico Legal, sin poder ser repatriado a su país de origen: Haití.