Hoy, poco después de las 10 de la mañana, arribó hasta el Juzgado de Garantía de Temuco el suspendido fiscal de Alta Complejidad de la Región de O'Higgins, Sergio Moya.
El persecutor se presentó ante el tribunal debido a que su defensa solicitó una audiencia de cautela de garantías en el denominado "Caso Huracán", en el que se investiga la eventual implantación de mensajes de texto que se utilizaron como evidencia para inculpar a comuneros mapuche de atentados incendiarios.
En esta causa, a Moya se le acusa de haber asesorado, fuera de sus atribuciones, a miembros de la Unidad de Inteligencia Operativa Especializada de Carabineros (U.I.O.E) de La Araucanía.
Al respecto, Moya afirmó que se reunió con el exgeneral director de Carabineros, Bruno Villalobos, el general (R) Gonzalo Blu y el mayor (R) Patricio Marín en su domicilio en Rancagua.
Esto, luego de que antecedentes de una causa que seguía Moya desde el año 2012 -que decía relación con un asesinato de un sargento argentino en la frontera de dicho país por parte de dos sujetos que serían miembros de una célula armada del MIR, llamada Operación Andes- fueran recibidos por él a través de informes de la U.I.O.E.
A partir de estos antecedentes, Moya acusó la recepción de más informes de dicha unidad de inteligencia. Posteriormente, lo contactó el mayor (R) Marín -miembro de la U.I.O.E y a quien Moya afirmó conocer desde 2008 mientras él ejercía como persecutor en la región de La Araucanía- para que le entregara su opinión respecto a las pericias realizadas por el software Antorcha.
En este punto, Moya declaró que manifestó sus dudas respecto a esta aplicación en varias ocasiones. Una de ellas fue a través de un correo electrónico difundido por los medios, en el que se daba cuenta de una serie de instrucciones de Moya al expolicía, con los pasos que se deberían seguir para elaborar el informe de las presuntas interceptaciones a mensajes de WhatsApp.
https://www.latercera.com/nacional/noticia/arias-moya-caso-huracan/654488/
Fue durante el desarrollo de estos evento que Moya recibió a Blu, Marín y Villalobos. En una reunión que mantuvo solo con este último, la que se produjo luego que este tuviera que volver de sus vacaciones luego que estallara el "Caso Huracán", el exgeneral le habría manifestado que pretendía renunciar a la institución, a lo que el fiscal le habría sugerido que no lo hiciera, ya que venía el cambio de mando del nuevo gobierno y probablemente sería sacado en ese momento.