En abril de 2022, un tribunal francés de la ciudad de Besanzón condenó a Nicolás Zepeda a 28 años de cárcel por asesinar a su exnovia, la japonesa Narumi Kurosaki en un hecho ocurrido en 2016. El chileno, quien conoció a Narumi en Japón en 2014 cuando llegó a continuar sus estudios, negó el crimen durante todo el juicio. El cuerpo, hasta ahora, no ha sido encontrado.

Sin embargo, la defensa del chileno, a quien también se le condenó a pagar cerca de $175 millones de pesos en indemnizaciones para la familia de la japonesa y para su exnovio Arthur Del Piccolo, apeló del fallo con lo que el tribunal ordenó un juicio de apelación.

Así las cosas, este martes, en Francia, se abrirá el juicio, lo que podría extenderse por tres semanas. Durante el anterior, el fiscal Étienne Manteaux dijo que “la hipótesis más probable” era que Zepeda la asfixió y luego arrojó el cuerpo al río Doubs. Según la fiscalía, fue asesinada en su habitación el 5 de diciembre entre las 3.15 AM y las 3.21 AM.

Sin embargó, el padre de Nicolás, Humberto Zepeda aseguró que su hijo es “inocente”. “No se encontraron ninguna huella de ADN de Narumi en el vehículo que utilizaba de Nicolás. La policía no ha encontrado nada, no ha encontrado ningún cuerpo que permita saber con exactitud y una evidencia clara de que hay una persona fallecida”, dijo en entrevista con 24 Horas.

En esa línea, un hombre, identificado como Said Neremi, afirmó haber visto a Narumi con vida el 11 de diciembre del año pasado, en un restaurante. En conversación con Chilevisión dijo: “Me dio su nombre y me dijo que era una estudiante japonesa. Escuché la conversación que tuvo diciendo que tenía miedo, que no se podía quedar más, que se tenía que ir de la ciudad. Estaba en compañía de un joven militar. Soy categórico y concluyente, Narumi está viva”.

En diciembre de 2016 una camarera de un bar, identificada como Stéphanie Beyer, dijo haber visto el 19 de diciembre de ese año a Narumi (la fiscalía dice que la joven fue asesinada el 5 de diciembre de 2016). La noticia fue recogida por el medio galo France 3; sin embargo, en todo ese tiempo, nunca apareció un registro.

Para este nuevo juicio, Zepeda cambió a su abogado: su representante ante tribunales será el destacado letrado Antoine Vey, quien defendió a Julian Assange en Londres. Se desconoce si el sujeto que afirma haber visto a Narumi será citado a declarar ante el tribunal.

El caso

Zepeda, afirmó en una declaración a la PDI que conoció a Narumi Kurosaki por una fiesta de la organización para la interacción de japoneses y extranjeros llamada TISA, para la que Zepeda prestaba servicios como DJ. El chileno, entonces cursaba estudios en la Universidad de Chile y participó de un intercambio estudiantil desde abril de 2014 a abril de 2015, en la Universidad de Tsukuba, Japón, donde estudiaba también la joven.

El chileno viaja el 28 de noviembre de 2016 a Europa y a los días se encuentra con Narumi Kurosaki, que estudiaba francés y vivía en una residencia del campus de la Universidad de Besanzón. Ella tenía entonces 21 años. La última que vez que se la ve es cenando con él en el restaurante “La Table de Gustave”, 25 kilómetros al sur de Besanzón, la tarde del 4 de diciembre. De madrugada, los compañeros de la residencia de estudiantes escuchan gritos y golpes procedentes de la zona de su habitación.

Su desaparición no se denuncia hasta varios días después. Durante ese tiempo, su exnovio, que en septiembre de ese año la había amenazado en un video publicado en internet y retirado posteriormente, regresa a Chile. Zepeda admite haber ido a su habitación para mantener sexo, que describe como consentido.

Poco después de la desaparición, Francia emitió una orden internacional de captura contra Zepeda, pero un magistrado chileno desestimó la orden de arresto en febrero de 2017.

El miércoles 17 de abril de 2019, la fiscal Tania Sánchez, de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte interrogó a Zepeda en Santiago en presencia de investigadores franceses encabezados por el fiscal Etienne Manteaux.

El 2 de diciembre de 2019 la Cancillería chilena recibió la solicitud de extradición por parte del gobierno de Francia. Fue acogida por el ministro instructor Jorge Dahm Oyarzún a principios de abril de 2020. En julio de 2020, fue extraditado a Francia para ser interrogado sobre el caso.