Sin pena de cárcel. El excarabinero Manuel Noya fue condenado a dos años de pena remitida por el delito de uso excesivo de la violencia, con resultado de lesiones graves en contra del joven universitario Rodrigo Avilés en medio de la protesta realizada el 21 de mayo de 2015.
Esto se traduce en que el exfuncionario de Carabineros deberá firmar mensualmente en Gendarmería por un período de dos años y medio.
Noya apuntó y atacó con el chorro del guanaco al estudiante, quien permaneció un mes con riesgo de muerte. En 2015 comenzó la investigación que definió en un juicio oral los cargos para el ex funcionario quien accionó en contra de una masa de manifestantes a menos de cuatro metros de distancia y con una potencia que se compara a un choque de un automóvil a 120 km/hrs.
La Fiscalía había solicitado 541 días de prisión por el delito de homicidio frustrado, sin embargo, la definición del Tribunal Oral en lo Penal descartó esta figura penal.
El padre y abogado del joven, Félix Avilés, aseguró que "no estamos de acuerdo con la pena (...) vamos a estudiar los antecedentes y asumimos lo que la Corte ha determinado".
En tanto, el joven Avilés aseguró que la pena "es baja para lo que me pasó, necesitamos una reestructuración de FF.EE. de Carabineros, ya vemos lo que pasó ahora con la joven".